De estar en la cima de la telenovela mexicana al anonimato total: así está hoy la actriz Adela Noriega a sus 52 años
La artista multipremiada triunfó en Latinoamérica y Estados Unidos y se transformó en una verdadera estrella de la pantalla chica. De un momento a otro, desapareció sin dejar rastros ¿En qué anda?
Adela Noriega es considerada una de las más talentosas actrices de México. Empezando desde muy pequeña, participó de una larga lista de novelas que fueron éxitos rotundos en Latinoamérica y Estados Unidos. Aclamada por el público y después de haber recibido decenas de premios, Adela desapareció por completo del mundo artístico y poco se sabe sobre ella.
Nacida el 24 de octubre de 1969 en Ciudad de México, la descubrió un manager mientras recorría un centro comercial con su mamá y empezó a hacer publicidades de televisión y videos musicales, como “Palabra de honor” de Luis Miguel.
En lo que respecta a la televisión, en 1984 debutó en el programa “¡Cachún cachún ra ra!” y, posteriormente, puso un pie en el mundo de las telenovelas y fue catapultada a la fama que la sigue hasta hoy, aunque esté retirada. “Principessa” y “Juana Iris”, fueron las primeras, donde interpretó a las villanas de la historia.
Para ese entonces, la pantalla chica y el público entero la adoraban. Pero, hace 14 años, Adela tomó una firme decisión que parece respetarse hasta hoy: retirarse del mundo artístico. Hoy en día, lleva una vida tan reservada que poco se sabe de ella, ni siquiera los periodistas de espectáculos.
Como no se sabe a qué se dedica actualmente, tampoco se tienen muchas certezas acerca de las razones de fondo que la llevaron a pasar de ser la estrella mimada de Televisa y una artista consagrada en toda la región al anonimato total.
Fue la productora Carla Estrada quien conversó sobre Noriega e hizo algunas revelaciones acerca de ella. Mediante una conferencia de prensa aseguró que, aunque al público le parezca algo extraño, ella tampoco sabe nada de la actriz.
De todas formas, contó que hace dos años sí pudo tener un contacto telefónico con ella en el que pactaron verse, pero ese encuentro nunca se concretó: “Para mí también es una interrogación ¿Qué pasa con Adela?. No la he visto hace mucho, me habló, yo creo que hará dos años y me dijo ‘¿qué vas a hacer? ¿trabajamos?’, ‘Sí claro, vamos a comer’, y hasta ahorita no fuimos a comer”, soltó la conductora.
Por otro lado, Estrada reveló algunas infidencias sobre los días de rodaje compartidos con Adela Noriega y las humildes exigencias que tenía la afamada actriz: “Lo único que exigía, y entre comillas, era que comiéramos juntas; y comíamos atún con aguacates en su camper. Pero la verdad es que no es una persona que te haga exigencias en lo más mínimo. Yo creo que los protagonistas deben tener una característica: aguantar el sol, aguantar el frío y caminar descalzos sobre piedritas”, agregó.
En medio de su relato, Carla no pudo esconder su cariño hacia la artista, y confesó que es una de sus estrellas favoritas y consentida del ambiente: “Nos queremos mucho y ella pues literalmente empezó conmigo, comenzamos a crecer juntas en este medio y cuando le cuento una historia es fácil”, cerró Estrada, quien participó junto a Adela en aclamadas producciones como “Amor real” y “El privilegio de amar”.
La carrera de Adela Noriega hasta desaparecer del medio
Noriega debutó como actriz protagónica en 1987, en la miniserie de época, Yesenia. Ese mismo año, obtuvo el papel protagónico en Quinceañera, un melodrama juvenil que presentó las problemáticas que viven los adolescentes en su tránsito de la niñez a la vida adulta.
En 1993, se mudó a Estados Unidos y se unió a televisora norteamericana, Telemundo donde interpretó el personaje principal de la telenovela Guadalupe, que resultó ser un éxito internacional, especialmente en los países árabes.
Dos años después, se marchó a Colombia y se unió a la productora de televisión R.T.I. para protagonizar María Bonita (1995). En 1997, regresó a México y firmó un contrato millonario con Televisa por seis años. La primera telenovela que grabó es María Isabel, donde interpretó a una joven indígena de la etnia Huichol. María Isabel es una de las primeras telenovelas que muestra la diversidad étnica de México, la vida de una comunidad indígena.
A continuación protagonizó El privilegio de amar (1998), compartiendo créditos con Helena Rojo, oficialmente el programa más visto de la televisión mexicana.
En 2003, regresó como protagonista de la altamente aclamada telenovela, Amor real, que retrata los conflictos de las revueltas de la época post independiente de México. A comienzos de 2008, regresó a la televisión como la actriz principal de Fuego en la sangre, la adaptación mexicana de la telenovela colombiana Las aguas mansas.