Con un pie en diciembre empezamos la carrera hacia el verano, y eso nos permite pensar en nuevos platos para nuestras mesas, empezamos a tener ganas de cosas más frescas y los guisos, sopas y comidas calentitas empiezan a quedar atrás. Para no caer en dietas extremas que no nos hacen bien a nuestra mente y cuerpo te invitamos a pensar en cómo llenar nuestro verano de platos saludables, completos, nutritivos y, por supuesto, placenteros. No sentir que estamos a dieta, pero alimentarnos de una manera saludable, es el mejor paso para formar hábitos que nos acompañan para toda la vida.

Llega la hora del almuerzo/cena y se nos viene a la cabeza "¿Y ahora qué cocino?" Muchas veces buscamos la respuesta en platos típicos: fideos con salsa, bife a la criolla, tarta, salteado, canelones, milanesas con puré etc. Te quiero mostrar que hay otra forma de pensar los platos, debemos poner el foco en los nutrientes.

Un plato completo puede estar elaborado a partir de alimentos que aporten fibra, vitaminas, minerales, hidratos de carbono, proteínas y grasas saludables; entonces cuando aprendemos cuáles son los alimentos que aportan en mayor medida estas sustancias, podemos armar un plato completo saludable, rico y fácil de hacer. Para ayudarnos con eso, la doctora Virginia Busnelli, (MN 110351), autora del libro “¿Es Estrés o tu tiroides?" recomiendó a cronica.com.ar: 

 

  • Fibra, vitaminas y agua: En este grupo se encuentran nuestras amadas VERDURAS. Para armar un plato liviano y fresco es importante la presencia de este grupo de alimentos. Podemos pensar en un colchón de hojas verdes (lechuga, achicoria, rúcula, kale…) y sobre el mismo el agregado de otras verduras cruda o cocidas. ¡Las verduras son indispensables! Y la variedad de sus colores significa un aporte de una gran diversidad de nutrientes. En este mismo grupo podemos incluir a las FRUTAS, ¡aprovecha el verano y anímate a usar frutas en tus ensaladas! Entre ellas: naranja y frutilla que aportan una gran cantidad de Vitamina C a tus platos.
  • Proteínas: Luego de tener tus verduras listas en el plato, comenzamos a pensar que opción de proteína puedo incluir en el mismo. Aquí podemos elegir aquellas provenientes del reino animal: alguna carne magra, huevo, ricota o quesos bajos en grasa, yogurt natural. Y también armar platos con proteínas vegetales: legumbres, tofu, soja texturizada…
  • Hidratos de carbono: Una vez que aseguré mis verduras y proteínas busco alguna opción de carbohidrato, aquí hay un detalle importante… ¡Si podemos elegir aquellos que tienen fibra muchísimo mejor! En este grupo se encuentran los siguientes alimentos: arroz integral o yamani, fideos integrales, quínoa, trigo sarraceno, avena, pan integral, fajitas o masas integrales, papa, batata, choclo.
  • Grasas saludables : Ya casi tenemos el plato listo, al mismo podemos coronarlo con algún alimento que aporte grasas buenas para mi salud, como por ejemplo aceite de oliva, aceitunas, palta, semillas molidas y frutos secos.

Anímate a jugar ya pensar en nutrientes, una vez que los tengas podés elaborar algún plato complejo o simplemente unirlos a todos y crear ensaladas súper completas.

Y para cerrar… ¡No te olvides de acompañar tus creaciones con agua!