Tras casi tres días de protesta a lo largo de la céntrica avenida porteña 9 de Julio, con epicentro en las puertas del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, los manifestantes comenzaron en el mediodía de este viernes a levantar las carpas en las cuales pasaron dos noches.

Concretaron la manifestación, consistente en un bloqueo del tránsito de once cuadras -entre las avenidas De Mayo y San Juan-, en reclamo de la ampliación de programas de empleo y una mayor ayuda alimentaria para comedores.

Los líderes de la protesta exigían ser recibidos por el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Juan Zabaleta, quien no les concedió la cita con el argumento de que, primero, tenían que suspender el gigantesto bloqueo, que incluía la interrupción del Metrobus.

La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, habló sobre el conflicto en la mañana del jueves. “El ministro (Zabaleta) recibió antes de la protesta a quienes están acampando en la 9 de Julio".

"Ellos (por los líderes de los manifestantes) tenían decidido un plan de lucha en el que iban a realizar tres acampes y éste era el segundo. Decidieron llevarlo adelante igual, aunque las negociaciones estaban iniciadas. Confiamos en que las negociaciones puedan retomarse. La propuesta es la reconversión de planes en trabajo genuino”, expresó Cerruti.

Por su parte, personal del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires implementaba en el mediodía de este viernes un operativo especial para recolectar residuos y limpiar la zona.

Los grupos que participaron en la protesta están nucleados en la denominada Unidad Piquetera y son integrantes del Polo Obrero, MTR-Votamos Luchar, el CUBA-MTR, el Bloque Piquetero Nacional, la Agrupación Armando Conciencia, la Organización 17 de Noviembre y el Movimiento Territorial (MTL-Rebelde), entre otras organizaciones.

Los manifestantes, en pleno acampe, realizaron actividades como cortes de pelo, peinados solidarios, ollas populares y, en la noche del jueves, un recital con músicos que se prestentaron sobre un camión.

Entre las carpas, los carteles con consignas y las llamas de fuego de las ollas, se montó una feria. Algunos objetos que pusieron a la venta, como artesanías y plantas, mientras que por otros se pedía una colaboraión y hubo servicios gratuitos.