Camila de "Gran Hermano" le propuso a Marcos dormir juntos, pero él la rechazó de una manera increíble
En Gran Hermano, Camila insiste con estar cerca de Marcos y hasta quiso acostarse a su lado. Él, por su parte, no quiere saber nada con ella. ¡Mirá los videos!
Los participantes de " Gran Hermano" disfrutaron de una "noche de película" en la que les brindaron almohadones, pijamas y hasta pochoclos para disfrutar en el living. Con esa excusa, Camila Lattanzio aprovechó y le propuso a Marcos Ginocchio dormir juntos, pero él la rechazó de una manera increíble.
El pasado viernes 17 de febrero, no tuvieron la fiesta semanal. En su reemplazo, la producción decidió transmitirles una película recién estrenada, por lo que puso colchones pegados uno al lado del otro frente a la televisión. Cuando se hizo tarde y llegó el momento de descansar, comenzó el dilema para el salteño, quien tuvo que "soportar" otra vez a su compañera.
"¿Ya vamos a dormir?", preguntó ella. Mientras él ya estaba acostado y se había acomodado a su gusto, Camila se encontraba parada y todavía no tenía su espacio. Aunque quiso colocarse en un lugar determinado para estar lo más cerca posible del joven, no cumplió con su objetivo.
Gran Hermano: Camila quiso dormir junto a Marcos y él la rechazó enseguida
Julieta Poggio y Juan Ignacio "Nacho" Castañares Puente permanecían tapados. Camila buscaba su lugar perfecto: "¿Te querés poner bien?", le cuestionó a Marcos. Como no obtuvo respuesta de su parte, insistió. "Dale, gordo pancho", expresó. Acto seguido, el salteño se sentó en la cama para revisar la zona.
"Pero si entrás ahí, ¿o no?", reflexionó el joven. "Sí, pero vos tenés los pies ahí", le contestó ella. Cuando él le indicó dónde ponerse para dormir, no dudó en terminar la conversación con una inesperada frase: "Dormí como quieras, flaco. Dormí como quieras". Luego lo miró a Nacho, se rio y por fin se acostó.
Esta no es la primera vez que Camila intenta dormir con Marcos. Hace algunos días, entró a la habitación en la que él estaba descansando y se le tiró encima. "¿Qué te pasa? Dios", señaló él, mientras ella, por su parte, se reía. "La vida es una sola. A ver, sonreí. Sonreí. Saludame bien", finalizó la mujer antes de irse.
Además, en otras ocasiones, lo persiguió, le insistió para que lleve a cabo actos que no quería y hasta lo tocó sin su consentimiento. En las redes sociales, los seguidores demostraron su repudio ante el acoso, principalmente porque el salteño no quiere saber absolutamente nada con ella y hasta la evita cuando puede. Por la personalidad que tiene, siempre lo hace de manera disimulada y amable.