En las últimas horas, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta amarilla por viento Zonda con ráfagas que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora para el sur de Mendoza, otra por lluvias de variada intensidad para el este de Chubut y una tercera por nevadas en la costa de Tierra del Fuego.

Según la información difundida, para el sur de Mendoza, en la zona baja de Malargüe, regía una alerta de nivel amarillo por viento Zonda con velocidades de entre 40 y 60 kilómetros por hora (km/h) y ráfagas que pueden alcanzar los 70 km/h.


Este fenómeno puede provocar reducción significativa de la visibilidad, un repentino aumento de temperaturas y condiciones de baja humedad relativa.

Para la población de la zona, el organismo meteorológico recomendó asegurar los elementos que puedan volarse; mantenerse lejos de los árboles, ya que la fuerza del viento podría quebrar alguna de sus ramas; no estacionar vehículos bajo los árboles; y mantener cerradas las viviendas de la manera más hermética posible.

Por otro lado, este miércoles también estaba vigente una alerta amarilla por lluvias en el este de Chubut, en las localidades de Mártires, Telsen, Gaiman, y en la zona de la meseta y la costa de Biedma, de Florentino Ameghino y de Rawson.

El área será afectada por lluvias de variada intensidad y se prevén valores de precipitación acumulada entre 10 y 20 milímetros, pudiendo ser superados en forma puntual, mientras que en regiones más elevadas las precipitaciones pueden darse en forma de nieve.

A modo de recomendaciones, el SMN pidió evitar actividades al aire libre; no sacar la basura; retirar objetos que impidan que el agua escurra; y quedarse lejos de zonas costeras y ribereñas.

Nevadas en Ushuaia

Por último, el SMN también reportó que está vigente para esta noche una alerta amarilla por nevadas para la costa de Ushuaia, en la provincia de Tierra del Fuego, donde se esperan valores de nieve acumulada entre 10 y 15 centímetros. 
El SMN aconsejó a la población evitar actividades al aire libre; retirar periódicamente la nieve acumulada en los techos; circular con vehículos adecuados y preparados para hielo y nieve; y ventilar vehículos y viviendas para evitar acumulación de monóxido de carbono.

El nivel amarillo implica "posibles fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas", indicó el organismo nacional.