Un momento de profundo dramatismo se vivió este miércoles en horas de la mañana en la zona de Punta Iglesia, ciudad de Mar del Plata cuando un perro de raza Caniche Toy que paseaba junto a una familia, en un descuido, cayó al mar. Afortunadamente, un valiente vecino que estaba en el lugar no dudó en ponerse al hombro la causa y rescatar al animal. 

Según el relato de los testigos, cuando la familia vio que su mascota había caído al mar, comenzó a pedir ayuda de forma desesperada. Fue entonces que apareció un hombre que en cuestión de minutos, se quitó la ropa y se zambulló al mar con el único objetivo de rescatar a la mascota que, pese a todos sus esfuerzos no lograba llegar a la zona rocosa para poder salir a la superficie.

La dramática escena fue registrada con télefonos celulares por transeúntes que pasaban por la zona al momento que se desató el acto de rescate. 

Luego de sumergirse en las aguas, el hombre salió del mar con el perro sano y salvo en brazos y, una vez en la orilla se lo entregó a sus dueños quienes felices lo recibieron con los brazos abiertos.

El heroíco gesto del nadador, de poner en riesgo su vida para salvar al animal, fue ovacionado por todos los presentes.

Otro Caniche de City Bell en el ojo de la tormenta

Una familia de la ciudad de City Bell vivió un calvario tras el secuestro de su perro Caniche, por el que los delincuentes pidieron el pago de un rescate para ser entregado con vida. Las autoridades lograron concretar una amboscada, los responsables fueron detenidos y el canino fue recuperado. 

El episodio tuvo lugar a fines de marzo y se dio a conocer a partir de una denuncia de una de las víctimas, que llamó al 911 para alertar que era extorsionada por su mascota. Fuentes policiales indicaron que los delincuentes le exigieron 15 mil pesos y que los entregara en Camino General Belgrano y 467, en esa localidad de La Plata. 

Con el dato del rescate, los oficiales del Gabinete Técnico Operativo de la Comisaría Décima montaron un operativo encubierto para dar con los delincuentes. Una vez en el lugar, vieron a los extorsionadores con el perro entre sus prendas y procedieron a interceptarlos, y quedaron detenidos.