Hace unos pocos días saltó una nueva alerta alimentaria por un lote de Huevos Kinder, que podría contener una enfermedad bacteriana llamada Salmonella. Esta afección, anualmente, afecta a millones de personas porque es trasmitida a través de alimentos en mal estado o agua contaminada. La preocupación deriva en que puede ser mortal si no es diagnosticada rápidamente

Tras registrar casos en Europa, sobre todo en Francia y Reino Unido, la empresa de golosinas, Ferrero, decidió suspender la venta de "Kinder Sorpresa" en formato de 20 gramos; "Kinder Schoko-Bons" con fechas de caducidad entre finales de abril y finales de agosto; "Kinder Happy Moment" y "Kinder Mix" con fechas de caducidad a finales de agosto. Esta pedida es de precaución, teniendo en cuenta que en muy pocos días es pascua. 

¿Qué es la Salmonella?

Es el nombre de un grupo de bacterias y una enfermedad que se denomina Salmonelosis. Esta afección se contagia por alimentos y agua contaminada. Se encuentra principalmente en productos de origen avícola, los huevos, la carne vacuna y, algunas veces, en las frutas y vegetales sin lavar. Al ser un padecimiento relacionado con la ingesta, afecta principalmente   el aparato intestinal

La Salmonella es reconocida como enfermedad desde 1885, cuando Daniel Elmer Salmon, patólogo y veterinario estadounidense, encontró el origen de una grave intoxicación que afectaba a las personas en ese momento. Su teoría fue comprobada cuando aisló a un grupo de cerdos infectados de cólera. 

Así se ve la Salmonella en el microscopio. 

¿Qué síntomas da la enfermedad?  

En este contexto de pandemia que vivimos por el Covid-19, es sumamente importante saber distinguir cuando los síntomas o características que pertenecen a cada una de estas afecciones de la salud. Las manifestaciones de la enfermedad comienzan a manifestarse entre 6 y 72 horas después de la ingesta del alimento contaminado. Es crucial destacar, que la bacteria vive dentro del organismo humano entre 2 y 7 días si es tratada. 

Las personas infectadas presentan principalmente: 

  • Vómitos
  • Diarrea aguda
  • Escalofríos
  • Dolor y calambres abdominales
  • Náuseas
  • Dolor de cabeza
  • Fiebre
  • Sangre en las heces
Los síntomas pueden ir de leves a graves. 

¿Qué hacer ante una sospecha de Salmonella? 

Las infecciones suelen ser leves y no requieren de tratamiento antibiótico, solamente se necesita de una dieta liviana y un buen descanso. Sin embargo, cuando los síntomas son agudos y duran más de dos días, es fundamental recurrir al médico de urgencias. Cuando la infección por pasa del intestino al torrente sanguíneo, puede causar graves efectos secundarios y hasta la muerte

La Salmonela puede ser muy peligrosa en niños pequeños, las mujeres embarazadas, los ancianos y las personas con sistemas inmunitarios debilitados, ya que se generara una gran deshidratación y una infección de otros órganos del cuerpo. 

¿Cuál es el tratamiento para la Salmonella? 

Para los casos leves la recomendación es tomar mucha agua, hace una dieta líquida/blanda por algunas jornadas y un buen descanso. No está recomendado para casos leves o moderados, los antimicrobianos podrían no eliminar completamente la bacteria y seleccionar cepas resistentes. 

En los casos graves, el tratamiento consta en la reposición de los electrolitos perdidos a raíz de los vómitos y la diarrea. Por eso se hace un suministro de sodio, potasio y cloruro. Si la deshidratación es muy importante, el mejor tratamiento es la internación temporal. 

¿Cómo prevenir la bacteria? 

  • Evitar la contaminación de los alimentos. Mantener todos los productos dentro de la heladera para que no pierdan la cadena de mantenimiento. A la hora de cocinarlos, utilizar utensilios diferentes para cada comida. 
  • La cocción completa destruye la bacteria, con lo cual es crucial cocinar muy bien cada comida. No se debe consumir carne o huevos crudos o poco cocinados ni productos lácteos crudos o sin pasteurizar. 
  • Ante un caso confirmado de Salmonella en el hogar, las personas infectadas no deben preparar alimentos porque se puede transmitir. 
  • Lavar las manos con jabón después de cambiar pañales o ir al baño, ya que la bacteria puede estar en los desechos intestinales. 
  • Lavar las manos después de manipular animales domésticos como pueden ser gallos, pollitos, gallina, aves en general y reptiles. 
  • Lavar bien los elementos de cocina