A lo largo de la pandemia del coronavirus, varios remedios caseros aparecieron en las cadenas de WhatsApp prometiendo reforzar el sistema inmunitario contra la peligrosa infección, pero pocos de ellos han sobrevivido el escrutinio. Este no fue el caso de la "dieta arcoíris", que llegó a ser ampliamente recomendada por nutricionistas indios como un régimen nutricional para reforzar el sistema con el Covid.

También conocida como la dieta mediterránea, la organización de alimentos siguiendo los colores del arcoíris es aceptada por expertos como una manera efectiva de conformar una dieta variada y saludable. La dieta arcoíris va más allá de comer frutas y vegetales, garantizando un consumo diverso para recibir la mayor cantidad de nutrientes que las comidas tienen para ofrecer.

La ex presidenta de la Sociedad de Nutrición de la India, Nilima Joshi, la describió como "la combinación sólida de diversas fuentes de nutrientes, vitaminas y minerales que, en general, construyen un sistema corporal saludable que puede ser un requisito previo para combatir la tercera ola".

"Las proteínas adecuadas y la microbiota intestinal (microorganismos útiles en el intestino) son clave para desarrollar la inmunidad humana. Actúan como nuestros soldados para el sistema del cuerpo, mientras que las vitaminas A, B, C, D, K y minerales como el selenio y el zinc (granos) son las armas", concluyó la especialista, en diálogo con Times of India. Es la combinación de estos nutrientes y fitonutrientes la que hace a la dieta arcoíris una de las más recomendadas por nutricionistas.

Cómo armar la dieta arcoíris

La variedad de colores en un plato también puede estimular el apetito.

Tal como lo indica su nombre, la dieta arcoíris consiste de variar de comida a comida el color de los alimentos que ingerimos, para no perdernos de los beneficios que trae cada color y evitar los posibles efectos adversos por comer una sola comida demasiadas veces. Cada color tiene sus beneficios, y puede ser encontrado tanto en frutas y vegetales como en hierbas, especies, legumbres, nueces, semillas, cereales integrales e incluso té.

Para comer el arcoíris, se recomienda incorporar de dos a tres frutas o verduras de diferentes colores en cada comida y al menos una en cada tentempié. Si bien no es necesario comer todos los colores todos los días, la dieta sugiere incluirlos en las comidas varias veces a la semana. 

Rojo

Alimentos rojos como el tomate y sus derivados, la sandía, la guayaba y el pomelo rosa traen diversos beneficios. Además de ser grandes antiinflamatorios y antioxidantes, pueden beneficiar la salud del corazón, reducir el daño cutáneo relacionado con el sol y hasta reducir el riesgo de ciertos cánceres. Entre los nutrientes que proveen está el folato, potasio, vitamina A (licopeno), vitamina C, y la vitamina K1.

Naranja y amarillo

Al igual que los alimentos rojos, además de servir como antiinflamatorios, antioxidantes y poder beneficiar la salud cardiovascular, estos alimentos también pueden tener un efecto positivo en la salud ocular y reducir el riesgo de ciertos cánceres. Entre las zanahorias, batatas, pimientos amarillos, plátanos, piña, mandarinas, calabaza y maíz encontramos vitaminas y minerales como folato, potasio, vitamina A (betacaroteno) y vitamina C.

La dieta mediterránea no siempre incluirá todos los colores, dependiendo de la temporada de cada alimento.

Verde

En la espinaca, col rizada, brócoli, palta, espárragos, col verde, coles de bruselas y otras hierbas verdes encontramos una gran variedad de fitonutrientes, vitaminas y minerales. Principalmente, encontramos clorofila, carotenoides, fibra, folato, magnesio, potasio, vitamina A (betacaroteno) y vitamina K1. Entre los beneficios de la salud, las verduras crucíferas en particular pueden reducir el riesgo de cáncer y enfermedades cardíacas.

Azul y violeta

Además de beneficios antiinflamatorios y antioxidantes, los alimentos azules y violetas pueden  beneficiar la salud del corazón, mejorar la función cerebral y reducir el riesgo de trastornos neurológicos, diabetes tipo 2 y ciertos cánceres. Estos beneficios, traídos por nutrientes como la fibra, manganeso, potasio, vitamina B6, vitamina C y vitamina K1, pueden sumarse a la dieta incorporando arándanos, moras, uvas, berenjenas y ciruelas, entre otros.

Blanco y marrón

Alimentos como el coliflor, ajo, puerros, cebollas, champiñones, rábano japonés y la papa son ricos en diversos nutrientes. Entre otros, traen a la dieta fibra, folato, magnesio, manganeso, potasio, vitamina B6 y vitamina K1. Sus beneficios son: antiinflamatorios, antioxidantes, pueden reducir riesgo de cáncer de colon y otros cánceres y beneficiar la salud del corazón.