Fobias: ¿Qué son, cuáles existen y cómo se las puede tratar?
Desde animales, situaciones u objetos, hay varios tipos de fobia que pueden complicar la vida de un individuo si no se las trata de forma correcta. Crónica conversó con una experta, quien dejó sus recomendaciones. ¡Mirá!
La vida de un ser humano está plagada de situaciones favorables y no tanto, pero cuando estas atentan contra el ámbito emocional o psicológico, es importante recurrir a un profesional para tratar la afección. Una de ellas tiene que ver con la presencia de fobias.
Lo cierto, es que para tocar este tema, Crónica dialogó con la psiquiatra Cynthia Dunovits (M.N. 123009 y coordinadora de la Unidad de Ansiedad del Hospital de Clínicas), quien contestó todos los interrogantes.
¿Qué son las fobias?
“Las fobias simples pertenecen al capítulo de trastornos de ansiedad, que se caracteriza por un miedo exagerado, irracional, intenso ante una situación, circunstancia o un objeto específico. El paciente lo conoce como irracional y exagerado, pero no puede dejar de sentirlo y ese miedo que lo provoca genera ansiedad, y, por lo tanto, junto con la ansiedad, conductas evitativas, evita esa situación, ese objeto, esa circunstancia, aparece un miedo exagerado e irracional, pero persistente que se sostiene en el tiempo y como eso produce una intensa ansiedad, una emoción negativa, una situación de amenaza en la que se ve sobrepasada la amenaza ante los recursos que tiene el paciente para enfrentarla, entonces se genera la tercera pata de la ansiedad que es la evitación. No se sabe por qué pasa esto, hay teorías básico dinámicas de porque alguien le tiene miedo a un gato y otro no, pero la verdad es que se desconoce, a veces se cree que se da sobre un terreno ansioso específico y se diagnostica a partir de la clínica, porque el paciente la manifiesta”.
¿Cuáles son sus síntomas?
“Son los síntomas de ansiedad que uno siente cuando se siente amenazado, lo que hace es que se activa un sistema de amenaza, y lo que hacemos es liberar adrenalina y noradrenalina, que aumenta la frecuencia cardíaca, aumenta frecuencia respiratoria, entonces el paciente siente taquicardia, sudoración, falta de aire o sensación de ahogo, sofocos, escalofríos, entumecimiento o adormecimiento de las manos, temblor, agitación. Esos son los síntomas físicos y los síntomas de idea o cognitivos pueden ser mucho miedo, irrealidades, personalización, esos son típicos de ansiedad, entonces como se siente tan mal evita, esa es la tercera pata, entonces evito”.
¿Cuáles son sus causas?
“Se desconocen, no sabemos, porque a veces aparecen tras una situación traumática pero a veces no encontramos nada que tenga que ver con algo traumático y teorías psicodinámicas, que intentan encontrar porque qué razón una persona puede tener miedo a las agujas, si hay una cuestión traumática etc, pero lo cierto es que muchas veces no encontramos la causa, así como otras veces no encontramos las causas de otros trastornos de ansiedad”.
¿Cuándo aparecen?
“En general las fobias surgen en la infancia o aparecen en edad temprana como todo trastorno de la ansiedad, pueden aparecer de chicos, en la juventud o adulto joven. Todos los trastornos de ansiedad empiezan en general en estas franjas etarias, y se instalan en ese momento, como la mayoría de los trastornos psiquiátricos que tratamos en general. Sería raro que una persona de 40 o 50 tenga una fobia si antes no la tenía, en general cuando viene el paciente de 40 años que no quiere subirse al avión, le preguntamos, pero no siempre tuvo miedo a subirse al avión, o a veces aparece más tardíamente, pero es el recrudecimiento de un trastorno de ansiedad que había empezado anteriormente. En situaciones de duelo o estrés pueden recrudecer las fobias o miedos, cuando uno está en esa situación”.
¿Cómo se diagnostica?
“Como la mayoría de los trastornos psiquiátricos, el diagnóstico es clínico, lo hace el psiquiatra, cuando el paciente nos habla de un miedo irracional excesivo del cual el paciente tiene crítica, es importante que el paciente diga, yo sé que es excesivo, pero no puede dejar de pensarlo y sentirse así y eso lo inhabilita en un montón de circunstancias, hay fobias más inhabilitantes y otras menos, dependiendo la circunstancia de cada paciente. Por ejemplo, tengo miedo a las alturas no es lo mismo, un paciente quiere ser alpinista que uno que no le interesa y evita lugares altos y punto, pero el paciente tiene claustrofobia, es decir, miedo a subirse a un ascensor, entonces no puede ir a trabajar, no puede acompañar a su hijo a determinados lugares y eso si los inhabilita”.
¿Qué tanto perjudican a una persona?
“El paciente con una fobia específica se le produce con un objeto específico, en otros momentos no, si se le produce en otros momentos, entonces tiene además otro trastorno de ansiedad, porque después existe alguna fobia social o ansiedad social, que es esta sensación de miedo, falta de control acompañado de síntomas físicos que te produce la situación de exposición social, sea hablar en público hasta firmar un documento, hasta relacionarse con otro, en el cual el paciente siente que no está a la altura de las circunstancias, hacer el ridículo o sentir vergüenza. Si yo tengo miedo a exponerme en público, entonces dejo de ir a fiestas, a lugares, me aíslo y esto en personas de 20 o 30 años genera un impacto funcional importante”.
¿Quién lo sufre más?
“La fobia es uno de los trastornos de ansiedad más frecuentes, y es más común en mujeres que en hombres, de hecho, dentro de los trastornos de ansiedad es uno de los más frecuentes, lo que pasa es que muchos no consultan porque no le generan tanto impacto, pero es uno de los más posibles. Se habla de un 5 hasta un 13 por ciento de la población, más común en mujeres, porque hay mucha gente que no consulta”.
¿Cómo se las clasifica?
Las fobias se categorizan en tres grupos: 1) Fobia específica: ocurre cuando se le tiene miedo a algo determinado, es decir, a un objeto o situación específica. Las comunes son: Fobia a animales: en esta categoría figuran aracnofobia (arañas), cinofobia (perros), murofobia o surifobia (ratas), entomofobia (insectos), ailurofobia (gatos), bufonofobia (sapos), equinofobia (caballos), escolequifobia (gusanos), lepidopterofobia (mariposas) u ofidiofobia (serpientes). Fobia a entornos naturales: situaciones relacionadas con la naturaleza como astrofobia (rayos), brontofobia (tormentas), acrofobia (alturas), hidrofobia (agua), tanofobia (sol), cremnofobia (precipicios), pluviofobia (lluvia), etc. La fobia a la sangre es denominada hematofobia, a las agujas, belonefobia, a inyecciones, tripanofobia y heridas, traumatofobia.
2) Fobia social, conocida como trastorno de ansiedad social: las personas tienen un miedo intenso a una o más situaciones sociales. 3) Agorafobia: miedo a usar el transporte público, estar en espacios abiertos, en espacios cerrados, estar entre personas o fuera de casa, sin compañía.
¿Cómo son los tratamientos?
Para saber cuál es tratamiento que se llevará adelante, Dunovits dijo que “lo primero, segundo y tercero es la terapia para la fobia, en otro tipo de trastorno de ansiedad hacemos un tratamiento combinado, pero acá es más terapia de exposición progresiva, primero la exposición imaginaria, después se expone al nombre, posteriormente al objeto de a poco. Con el caso de la araña, le haces escribir la palabra, después le haces dibujar una, después que vean las fotos de una, es progresivo, se trata de evitar exposiciones masivas porque eso genera respuestas aversivas”.
“A veces solo basta con una terapia de exposición, y por eso se llama así, si los síntomas son muy desbordantes y el paciente no puede exponerse ni al primer paso, entonces utilizamos algunas medicaciones, y si el paciente tiene otros trastornos de ansiedad asociados como trastornos de pánico u otros trastornos de ansiedad, lo que se puede agregar es un antidepresivo si tiene comorbilidad con otros trastornos”, agregó.
“Hay casos en que el paciente se niega a exponerse porque le genera ansiedad y no quieren saber nada, y a veces que ni consultan, algunos no se suben a un avión y no consultan, porque el miedo está y no quieren exponerse a la idea de hacerlo, pero la exposición tiene una buena tasa de respuesta”, finalizó.
Por G.A.