La búsqueda de vacunastratamientos contra el COVID-19 y fármacos que ayuden a calmar sus síntomas nunca ha cesado. A pesar de los descubrimientos hay quienes siguen sufriendo las etapas de la enfermedad, como neumonías, dolores de garganta, altas temperaturas de fiebre o migrañas. Al igual que muchos otros casos, Susana Giménez no quedó extenta de los gajes del coronavirus y aseguró que su experiencia fue "horrible". Sin embargo, luego de hablar públicamente en una entrevista sobre su recuperación, reveló qué fue lo que la salvó y le alivió los dolores: el Tocilizumab

“Para todos los que me preguntaron cuál es la ampolla que me dieron cuando tenía COVID que me hizo tanto bien, se llama Tocilizumab”, escribió la diva en su cuenta de Twitter, y advirtió: “Por favor, tengan en cuenta que no se puede suministrar sin prescripción médica y es recomendable solo para ciertos casos de la COVID-19″.

La diva transitó la enfermedad en junio pasado en Punta del Este y requirió de dos semanas de internación en el Sanatorio Cantegril. Durante esos 15 días tuvo todo tipo de miedos, según aseguró en su primer entrevista tras su recuperación, que le dio a Cristina Pérez y Rodolfo Barili desde su casa de Barrio Parque. “Primero, morirme. Y después, que me entubaran. Eso me aterrorizaba, dije: ‘Si me tienen que entubar, déjenme ir porque no lo voy a soportar’. No tenía ganas de morirme, pero el terror que te agarra, estar sola en tu cuarto... Lloraba por todo”, confesó la conductora.

Y de inmediato habló del tratamiento que recibió y gracias al cual logró recuperarse: “En el Cantegril me dieron todo lo mejor que me podían dar y me salvaron en realidad dos inyecciones muy impresionantes, fuertes y caras que consiguieron en el sanatorio y me las pusieron”. Pero al no ser tan precisa, la catarata de consultas acerca de la medicación no tardó en llegar. Fue así que decidió responder a través de su cuenta oficial de Twitter. 

El Tocilizumab

La médica internista Mariana Lestelle precisó todo sobre este medicamento en una entrevista a Teleshow. Es una medicina que se comercializa desde 2009 utilizada para ciertas enfermedades reumatológicas que al parecer también ayudaría a combatir el COVID-19.

El tratamiento se aplica a través del suero y después del quinto día de internación, cuando los análisis de laboratorio del paciente comienzan a presentar alteraciones. “Se suma al tratamiento que recibió anteriormente. No es magia", advirtió la profesional.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) le pidió a Roche, el fabricante del fármaco, que “comparta la tecnología y los conocimientos técnicos” para aumentar su disponibilidad para luchar contra el COVID-19. Según los resultados de un ensayo clínico divulgado en febrero en el Reino Unido, el Tocilizumab puede reducir por sí solo un 4% la mortalidad por COVID-19, y su efecto se amplifica al ser utilizado en combinación con el corticoide.

"Es un anticuerpo monoclonal que limita la respuesta inmune inflamatoria exacerbada que genera el coronavirus. Se utiliza en pacientes con COVID-19 moderado o grave y se usa junto con la dexametasona”, detalló Lestelle. 

“Cuando uno ve que a pesar del oxígeno el paciente no responde bien y la neumonía bilateral se está complicando, el tocilizumab es uno de los elementos para considerar. Es carísimo”, explicó. 

Con respecto a su influencia en el coronavirus, detalló: "El coronavirus entra al cuerpo por determinados receptores, sobre todo en la vía respiratoria, y el daño que produce no es solamente porque entra en el cuerpo, sino porque el sistema inmune del organismo hace una respuesta inflamatoria sistémica". 

Luego concluyó: "Y si bien, además del sostén que necesite el paciente en general, todavía no hay ningún antiviral indicado, se necesita parar esa respuesta inflamatoria sistémica. Inicialmente se emplearon los corticoides, y luego se sumo este fármaco que habitualmente se usa en enfermedades autoinmunes”