En la Cumbre del G20 en Río de Janeiro, Brasil, el presidente de la Nación, Javier Milei, y el del vecino país, Luiz Inácio Lula da Silva, hicieron evidente la mala relación política con un frío saludo protocolar. Sin embargo, casi en paralelo con las expresiones faciales serias al saludarse, sus ministros firmaron un acuerdo para que la Argentina le venda mayor cantidad del gas que extrae en el Yacimiento Vaca Muerta.

Con el visto bueno de sus presidentes, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el de Minas y Energía brasileño, Alexandre Silveira, sellaron un entendimiento para aumentar las exportaciones del gas patagónico. Un intercambio prometedor para ambos: energía accesible para Lula, divisas genuinas para Milei.

La firma, según informó el diario O' Globo, se realizó en el Museo de Arte Moderno (MAM) en el mismo horario en el que Milei escuchó a Lula da Silva brindar el discurso de apertura de la Cumbre del G20 y el país, también más allá de las diferencias, confirmaba su adhesión al documento impulsado por el líder del PT, Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza.

La expectativa argentina por asegurar el superávit de la balanza energética en 2025 a partir de la finalización del Gasoducto Néstor Kirchner coincide con la necesidad de Brasil de “aumentar el volumen para disminuir el precio y reindustrializar el país”, según marcó como objetivo Silveira.

El acuerdo energético firmado entre Argentina y Brasil implica el aprovechamiento y redireccionamiento para la interconexión de gasoductos existentes. Entran en juego el Gasoducto Brasil-Bolivia ( Gasbol) que tiene menor uso en los últimos años; también la reversión del Gasoducto Norte, obra clave para el país.

El Ministerio de Minas y Energía de Brasil, comunicó que el entendimiento puntualiza que "el grupo deberá buscar utilizar la infraestructura ya existente en ambos países, permitiendo exportar gas argentino en el menor tiempo y al menor costo posible". 

Desde la cartera a cargo de Caputo informaron que “se firma un MOU con el objetivo de discutir la infraestructura necesaria para la exportación de gas argentino proveniente de Vaca Muerta a Brasil. Para ello se designan representantes de ambos países en un grupo conjunto que analizará las alternativas para llegar a una exportación de 30 millones de metros cúbicos diarios de gas natural en 5 años”, fijaron.

Para completar los 30 millones, la intención es desde el año próximo dar inicio a los envíos por 2 millones de metros cúbicos hasta llegar a 10 millones en tres años.

“Queremos aumentar una oferta de gas en Brasil y consecuentemente disminuir el precio. Precisamos tratar el gas como una energía de transición, aumentar el volumen para disminuir el precio y reindustrializar el Brasil, generando más oportunidades para nuestra gente”, indicó Silveira sobre la postura de Brasil.