Cumbre del G20: Javier Milei firmó el documento final, aunque marcó su rechazo a la Agenda 2030 y otras 4 diferencias
El Presidente adhirió a la declaración conjunta pero reiteró su oposición a los planteos de desarrollo sustentable de la ONU, a través de un comunicado oficial. Brindó un discurso ante los líderes mundiales donde “dejó en claro” los puntos que no acompaña ante sus pares en Río de Janeiro.
Había dudas sobre si el presidente de la Nación, Javier Milei, formaría parte del documento final de la Cumbre del G20 en Río de Janeiro, Brasil. Finalmente, lo firmó “disociándose parcialmente de todo el contenido vinculado a la Agenda 2030” que impulsa la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Además, se conocieron detalles de su discurso en la mesa con los líderes mundiales donde también “dejó en claro” cuatro diferencias.
La Argentina firmó el documento final del G20, el primero de la gestión de La Libertad Avanza, pero rechazó a través de un comunicado aparte de la Oficina del Presidente de la Nación una vez más los postulados para el desarrollo sostenible económico, social y medioambiental a nivel global -tal cual lo hizo cuando rechazó en la ONU la Agenda de Futuro-.
Así comunicó el texto de Presidencia las diferencias sostenidas por Milei aunque no volcadas en el documento final del G20. Por la misma vía el gobierno argentino agregó detalles del discurso de Milei en Brasil ya que en esta edición y por acuerdo de los Jefes de Estado participantes, llamativamente, no hubo transmisión en vivo de las intervenciones.
Por eso se conoció horas más tarde lo que Milei planteó cerca del mediodía en Río de Janeiro. Según la versión oficial y “sin obstaculizar la declaración de los demás lideres, Milei ha dejado en claro en su participación del G-20 que no acompaña varios puntos de la declaración” final.
Entre las diferencias, la comunicación oficial destaca cuatro marcados por el Presidente: “La promoción de la limitación de la libertad de expresión en redes sociales, el esqueта de imposición y vulneración de la soberanía de las instituciones de gobernanza global, el trato desigual ante la ley y especialmente, la noción de que una mayor intervención estatal es la forma de luchar contra el hambre”.
Desde la Casa Rosada agregaron las explicaciones para el rechazo a la Agenda 2030: “Los organismos y foros internacionales como el G20, se crearon con el espíritu de que todas las naciones involucradas pudieran reunirse para cooperar de forma voluntaria, en calidad de iguales y autónomas para, entre otras cosas, salvaguardar los derechos básicos de las personas”.
Sin embargo, “a casi 70 años de haberse inaugurado este sistema de cooperación internacional, llegó la hora de reconocer que este modelo está en crisis porque desde hace tiempo que está en falta con su propósito original”.
La postura oficial que Milei manifestó en la Cumbre del G20 insiste fervientemente, además, contra el punto de promover una “mayor intervención estatal es la forma de luchar contra el hambre”.
Y argumenta que “cada vez que se intentó combatir el hambre y la pobreza con medidas que incrementaban la presencia del Estado en la economía, el resultado fue el éxodo tanto de la población como del capital, además de millones de muertes de vidas humanas”.
“En el combate contra estos flagelos -continúa el comunicado de la Casa Rosada-, el Presidente Javier Milei tiene una posición clara, queremos luchar contra el hambre y erradicar la pobreza, la solución está en correr al Estado del medio".
"Debemos desregular la actividad económica para liberar el mercado y facilitar el comercio, y que el intercambio voluntario de bienes y servicios sea lo que traiga prosperidad porque ese capitalismo de libre mercado ya sacó de la pobreza extrema al 90% de la población global y duplicó la expectativa de vida".