La segunda reunión en Casa Rosada para ordenar la estrategia parlamentaria con los diputados aliados del PRO, fue encabeza por la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y tuvo como eje central asegurar los votos para defender el veto total del presidente, Javier Milei, a la ley que mejora los haberes jubilatorios y obliga a Nación a cancelar deudas previsionales provinciales.

Este miércoles habrá sesión especial en la Cámara de Diputados y una parte de la oposición planea insistir con la ley que el Presidente vetó. En Casa de Gobierno están confiados de que lograrán blindarlo y lo mismo repiten fuentes parlamentarias de La Libertad Avanza (LLA), pero a dos días de volver al recito, se mueven contrarreloj para que no haya sorpresas.

Al retirarse de Casa Rosada, el jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo, confirmó que estos encuentros con el Poder Ejecutivo se realizarán semanalmente. Forma parte de estas cumbres, además, el representante del minibloque MID que lidera Oscar Zago (ex LLA).

Así surgió del acuerdo alcanzado en la primera reunión del último viernes de agosto que encabezó el propio Milei luego de que el expresidente Mauricio Macri dejara en evidencia a través de las bancas que le responden en el Congreso su poder de daño al oficialismo y facilitara tres derrotas al hilo, incluida la ley de jubilaciones (con apoyo del PRO en el Senado, no así en Diputados).

 No estuvo presente Guillermo Francos en la reunión, quien se encuentra internado desde el fin de semana.
No estuvo presente Guillermo Francos en la reunión, quien se encuentra internado desde el fin de semana.

En esta oportunidad en el Salón de los Escudos, habló por el gobierno nacional Karina Milei acompañada por el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem (LLA). El de Menem es un puesto donde Macri aspira a colocar a Ritondo pero que, una alta fuente de Casa Rosada, es determinante al respecto: “eso no va a pasar”.

Karina y Menem no contaron con el jefe de Gabinete nacional, Guillermo Francos, puesto que permanece internado desde el fin de semana por un cuadro de malestar gastrointestinal. Sí estuvieron presentes el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán; y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger.

Sin la pieza que mejor relación tiene con lo bloques parlamentarios opositores, en Casa Rosada se habló de una sesión clave que pone a prueba la autoridad presidencial. No casualmente, Milei vetó por completo y no de forma parcial la ley que “atenta contra el superávit fiscal” e impulsan “degenerados fiscales”.

Los puntos claves de la reforma jubilatoria vetada por Javier Milei con la que insistirá la oposición

Milei busca dejar en claro es innegociable tanto el 8,1% que se aplicaría por única vez sobre los haberes de abril para compensar lo perdido por empalme (es decir, las jubilaciones de enero recibieron por DNU del Presidente un 12,5% pero la inflación fue de 20,6%); como el artículo que mueve el haber mínimo al piso de la casta básica total de un adulto por 1,09% (es decir, $317 mil -no tan lejos de la actual con el bono no remunerativo); como la cancelación de las deudas de Anses con las cajas previsionales de las provincias.

Las primeras habían sido planteadas como inamovibles por la oposición que impulsó la reforma en el Congreso incluso antes de la sanción, pero la tercera -un viejo reclamo de los gobernadores- podría haber sido tachada para lograr un acuerdo, tal cual lo demandaban desde las bancadas dialoguistas como la de Encuentro Federal que encabeza el diputado, Miguel Ángel Pichetto.

Cómo viene el voto a voto en Casa Rosada para el veto a jubilaciones

No hubo acuerdo, la ley se sancionó y el presidente Milei la vetó por completo. Ahora, la Cámara de Diputados acaba de oficializar la sesión especial para este miércoles que contará con presión extra de “la calle”, ya que hay movilizaciones convocadas a las inmediaciones del Congreso.

La oposición necesita dos tercios de los votos de los presentes. En base a esa regla, en La Libertad Avanza calculan que necesitan 88 para blindar el veto en la Cámara baja. Con los propios, los del PRO y el MID, alcanzan fácilmente 77 votos

Karina Milei se encargó este mediodía de que no haya fisuras en la bancada amarilla para partir de esa base. Faltan algunos más que el oficialismo busca en bancadas provinciales, que responden a gobernadores de Juntos por el Cambio. También del peronismo, como los tres tucumanos bajo la línea de Osvaldo Jaldo.

En Casa Rosada hacen hincapié en una cuestión táctica: qué hará el bloque de la UCR que en Diputados en junio votó a favor de la ley. Deslizan que algunos podrían ausentarse y disminuir el número necesario para que la LLA pueda blindar el veto.