Tras la presentación del presidente, Javier Milei, del Presupuesto 2025 en el Congreso, su jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y su ministro de Economía, Luis Caputo, recibieron en Casa Rosada a quienes consideran piezas claves en la La Libertad Avanza para comenzar la ruta parlamentaria de la Ley de leyes. “Calculan que la discusión en comisiones arrancará la semana próxima y llevará en total dos meses”, contaron a cronica.com.ar fuentes oficiales.

El Presupuesto para el año próximo ingresó ya por la Cámara de Diputados. Es en el marco de sus comisiones donde el oficialismo impulsará en menos de una semana el debate y calcula que para mediados de noviembre llegará al Senado. Francos y Caputo estiman que en siete días los diputados podrán empezar a recibir invitados propios y de la oposición y presentarán sugerencias de modificaciones

De la mesa de trabajo para impulsar el Presupuesto 2025 participaron este miércoles en la Rosada el titular de Diputados, Martín Menem, el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda de esa cámara, José Luis Espert, su par por el Senado Ezequiel Atauche, y el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán., quien viene de tener un rol importante en la estrategia para sostener el veto a la ley de jubilaciones.

No formó parte de la reunión, la vicepresidenta de la Nación y presidenta del Senado, Victoria Villarruel. Antes de retirarse de Balcarce 50, el senador Atauche dijo a la prensa acreditada: “Esperamos que salga lo más rápido posible y el Ministerio de Economía estará enviando a sus funcionarios al Congreso.

 El ministro de Economía, Caputo, y su secretario de Finanzas, Pablo Quirno.
. El ministro de Economía, Caputo, y su secretario de Finanzas, Pablo Quirno.

El jefe de bloque de La Libertad Avanza en el Senado se refiere a dos miembros del equipo que enviará el ministro Caputo. El secretario de Hacienda, Carlos Guberman, y el de Finanzas, Pablo Quirno. Dos cuadros técnicos que formaron parte de la redacción de la Ley de leyes.

Por ahora” no está en los planes que el ministro Caputo se presente a defender el Presupuesto ante los diputados de la oposición. Pero, abierta la temporada de tratativas, en Casa Rosada saben que es posible que con el pasar de las semanas deba hacerlo. La oposición, sin duda, lo va a exigir. 

El proyecto con el que Milei promete “ponerle un cepo al Estado y blindar el equilibrio fiscal”, ya generó polémica con los gobernadores a los que desde Nación se les pide “más juste”. Con los números propuestos en la Ley de leyes sobre la mesa, los primeros en ser escuchados en Casa Rosada fueron los jefes provinciales dialoguistas.

Espert calculó luego un recorte total de 20 mil millones de dólares. En Balcarce 50 sacaron una cuenta rápida sobre el ajuste que sugieren a las provincias porque “Nación ya hizo el suyo”. 

La cuenta no es muy sofisticada -reconoce un estrecho colaborador de Milei pero la hace igual-: el Producto Bruto Interno (PBI) en la Argentina es de 600 mil millones de dólares, el gasto público rondaba el 50% cuando asumimos, es decir, 300 mil millones de dólares, eso hay que llevarlo al 25%, entonces hay que ahorrar 150 mil millones.

Y continuó: “En Nación ahorramos 90 mil palos y la diferencia le queda a los demás. Son 60 mil millones de dólares dividido 24 provincias. No para ya, sino para los próximos tres años. Cada una tiene que decidir de dónde recorta 2.500 millones de dólares”.

Cerca de Milei están convencidos de que las provincias “tienen colchón para hacerlo, son superavitarias casi todas”. No ocultan que miran con lupa los listados de empleados públicos de cada distrito.

En tanto, la misma fuente aseguró a este medio que Milei no piensa “mover un dedo” para que salga el Presupuesto y remarcan que en caso contrario se guiarán una vez más con el del 2023 (no se trató en el Congreso el 2024) que le permite al Jefe de Estado “manejar los fondos de manera discrecional”. Igualmente las negociaciones con la oposición para lograr la aprobación de la hoja de ruta de la macro y microeconomía para el año próximo ya arrancaron. 

Ocurre, además, en la antesala de las tratativas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un nuevo programa de deuda. Conseguir los votos para el Presupuesto no es menor para Milei si quiere demostrar músculo suficiente hacia afuera del país y capacidad de generar consensos con la oposición en el Parlamento, tal como pasó con el blindaje al veto de la suba de las jubilaciones.