La Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados emitirá este jueves por la tarde dictamen sobre el Presupuesto 2023 después de varias jornadas de debate y de haber entrevistado a distintos ministros del Gobierno nacional.

Se espera la incorporación de cambios solicitados por los gobernadores sobre los subsidios para el transporte del interior y un nuevo mecanismo para el pago de deudas con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) y otros pedidos por legisladores sobre universidades, manejo del fuego y programas sociales.

El Frente de Todos tendría asegurado poder lograr un despacho con un alto consenso, ya que no solo lo firmarán los diputados oficialistas, sino que también lo haría el de Provincias Unidas, por lo que reuniría 25 firmas sobre las de los 49 integrantes de la comisión.


El resto, tanto los 23 de Juntos por el Cambio, como el del interbloque Federal, no firmarían ningún despacho o expresarían algunas disidencias parciales, y se inclinarían por el acompañamiento en general o la abstención cuando se de la votación en el recinto.

La intención del oficialismo es poder tratar el proyecto en una sesión que se celebraría el próximo martes a las 13, y que se extendería por más de 20 horas. El próximo lunes se reunirán los presidentes de bloque en Labor Parlamentaria para terminar de definir el tema.

El objetivo es obtener entre martes y miércoles la media sanción para permitir que el Senado tenga el tiempo necesario para convertir en ley este proyecto clave para el Gobierno antes del 30 de noviembre.


Desde el oficialismo pusieron como condición no tocar las variables económicas que estiman un crecimiento de la economía del 2%, una pauta inflacionaria del 60% y un descenso del déficit fiscal del 2,5% al 1,9%, que se busca con reducción de gastos y de subsidios.

Si bien existen muchos pedidos de cambio, el Presupuesto ya tiene más del 65% de los fondos destinados a gastos sociales, incluidos los pagos de los diferentes planes de asistencia, así como las jubilaciones y pensiones, y se priorizarán los fondos para salud, ciencia y educación.

El proyecto estima un gasto total de casi $29 billones, con una recaudación aproximada de $22,5 billones y un déficit primario de $6,3 billones. Además contempla un aumento del consumo privado estimado en 2,2% y la inversión en 2,9%, en tanto en materia de financiamiento se busca reducir la asistencia monetaria del Banco Central al Tesoro.


En cuanto a la distribución del gasto, contempla destinar a la Administración Gubernamental $1,6 billón, a Servicios de Defensa y Seguridad $1,2 billón, a gastos sociales $18 billones, servicios económicos $4,5 billones y a deuda pública $2,9 billones, lo que implica casi $29 billones.

También considera un aumento en las exportaciones de 7,1% contra importaciones que se incrementarían el año próximo 2%, y de esta manera, el superávit comercial pasaría de US$7.700 millones este año a US$ 12.300 millones en 2023.