El 70,6% de los hogares del AMBA -que comprende a la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense - se endeudaron, generaron nuevos ingresos, utilizaron ahorros o vendieron alguna de sus pertenencias y/o redujeron el consumo de al menos un alimento para hacer frente al impacto de la pandemia de coronavirus durante el año pasado, según un relevamiento del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

El Indec difundió hoy la segunda parte del “Estudio sobre el impacto de la Covid-19 en los hogares del Gran Buenos Aires” -región comprendida por la Ciudad de Buenos Aires y los 31 partidos del conurbano bonaerense-, entre agosto y octubre del 2020.


El resultado del informe mostró también que el 81,1% de los jefes y jefas de hogar asalariados de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense que mantuvieron en pandemia su puesto de trabajo previo lograron sostener su nivel de ingresos.



No obstante, mientras que para los jefes y jefas registrados esa situación alcanzó al 83,8% de las consultas, en el caso de los no registrados el porcentaje descendió al 67,2%.

Por otro lado, el trabajo indicó que el 68,3% de los hogares con jefe o jefa asalariado no registrado recibieron las prestaciones implementadas a partir de la pandemia en mayor proporción (superando en poco más de 20 puntos a la cobertura de los hogares con jefes y jefas asalariados registrados).

En el caso de los hogares con jefas y jefes que trabajaban de manera independiente y no realizaban aportes, las medidas nuevas cubrieron al 63,9% (esto supera en 26,3 puntos porcentuales la cobertura de los hogares con jefes y jefas trabajadores independientes que realizaban aportes).