Muchos padres de alumnos de colegios privados no llegan a pagar las cuotas de los establecimientos educativos, por lo que las tasas de morosidad están en aumento. Especialistas consultados este jueves por www.cronica.com.ar así lo sostuvieron. Y atribuyeron el hecho al incremento generalizado de precios.

El dato inflacionario de octubre último difundido por el INDEC fue del 6,3%, pero otros rubros vieron incrementados sus valores incluso por encima de ese porcentaje. Uno de los casos fue la educación, que subió el 7,1%. Si se tiene en cuenta el Conurbano bonaerense, la cifra fue aún más notoria, ya que trepó el 10%.

En ese contexto, la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de la Provincia de Buenos Aires (AIEPBA) reveló que en octubre pasado el 60% de las escuelas bonaerenses registró un índice de morosidad que alcanzó a más del 30% de los alumnos. La entidad que agrupa a 2.300 centros de enseñanza de gestión no oficial efectuó una encuesta a los propietarios de esos establecimientos.

La morosidad está relacionada con la inflación. Es un proceso: se da la inflación y aumentan los sueldos (de los docentes) por paritarias. Como el 82% del componente de una cuota de un colegio privado es costo laboral, tiene que aumentar la cuota”, explicó este jueves el secretario ejecutivo de AIEPBA, Martín Zurita, en diálogo con www.cronica.com.ar.

Hubo siete aumentos de salarios en el año y hubo seis aumentos de cuota hasta la fecha. Es una consecuencia casi directa. Y la mayor morosidad la vemos en los trabajadores informales, que sus ingresos no acompañan a la inflación. Por eso, hay preocupación”, consideró Zurita, licenciado en Gestión Educativa.

En la provincia de Buenos Aires las cuotas oscilan entre los $10.000 y los $150.000, dependiendo del nivel de subvención estatal que tenga cada escuela. Pero la mayoría de los colegios que cuentan con el aporte del Estado cobra, en promedio, $20.000.

Los jardines maternales son los que presentan menos morosidad. El 50% de los consultados en esos niveles educativos registra un incremento en el porcentaje de cobrabilidad. Lo contrario ocurre con los establecimientos de educación especial y en los centros de formación profesional, donde más del 50% de los propuetarios admite que hay más retrasos en los pagos que en 2021.

Baja de matrículas

"Nos preocupan los retrasos en el cumplimiento de los compromisos, pero también es un dato que alarma la caída en el número de inscriptos que tenemos para el año que viene. Si bien se está en pleno proceso, hay una merma aproximada del 15% con respecto al mismo período del año pasado. Y el sector inicial es el más afectado”, detalló Zurita.

A su turno, Gonzalo Peveri, asesor contable de AIEPBA, coincidió: "A diferencia de otros años, no podemos estimar ahora a cuánto estará el valor de la matrícula en marzo próximo. Perdimos mucha matrícula en 2020 por la pandemia. Para este año, creíamos que podíamos recuperarnos, pero nos agarró la inflación y eso está provocando una fuerte morosidad”.

En la encuesta de la entidad el 41% de los colegios declaró tener menos matriculados que en 2021. Los niveles maternal, inicial y primaria son los más afectados.

En inicial, o sea en los jardines de infantes, el 48% de los consultados registra menos consultas e inscripciones para 2023 que las plazas que cubrió en el actual ciclo lectivo.

Los padres de los alumnos buscan alternativas más accesibles

"Advertimos un corrimiento desde colegios con matriculas más altas, que ofrecen servicios educativos complementarios, hacia institutos que resultan más económicos. Y, además, este panorama se presenta luego de que la pandemia provocó el cierre de por lo menos 80 establecimientos en toda la provincia de Buenos Aires. Eso representa casi 80 mil pupitres menos en el sistema privado de enseñanza", advirtió Zurita.

Para AIEPBA, este año, la suba del costo de la matrícula en los colegios bonaerenses llegará al 89%, algo por debajo de la inflación anual proyectada, que se ubicaría por encima del 100%, según estimaciones privadas.