Movimientos sociales, partidos de izquierda y sectores sindicales se sumarán a partir de las 13 a la habitual marcha al Congreso, que todos los miércoles convocan agrupaciones de jubilados para pedir por mejoras en los haberes previsionales.

En esta ocasión el llamado se vio potenciado por los incidentes con fuerzas de seguridad que se produjeron en las últimas dos semanas, luego de que dispusieran desalojar de manera violenta a las columnas participantes por la aplicación del protocolo antipiquetes.

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Por eso se aguarda una concentración más grande, que incluso fue apoyada por la Confederación General del Trabajo (CGT), que el fin de semana emitió una comunicación apoyando la movilización, originalmente prevista para mañana. 

Sin embargo, los representantes sindicales resolvieron adelantarla un día para coincidir con las agrupaciones de jubilados y también con la sesión prevista para hoy, en la que Diputados buscará rechazar el veto de Javier Milei al aumento otorgado. 

"La marcha se adelantó porque la sesión finalmente se va a realizar el miércoles y no el jueves como se preveía. No tenía sentido hacer la marcha al día siguiente", dijo Hugo Yasky, secretario general de la CTA de los Trabajadores.

Su par de la CTA Autónoma, Hugo "Cachorro" Godoy, dijo que la movilización "será una muestra de solidaridad sobre la digna lucha de los jubilados y las jubiladas que, a pesar de que han sido reprimidos, semana a semana crecen en su capacidad y voluntad de movilizarse para defender el sistema previsional público y solidario".

También acompañarán el Polo Obrero y Unidad Piquetera, liderados por Eduardo Belliboni; la Corriente Federal y el Frente Sindical de la CGT; la UTEP, el Movimiento de Trabajadores Excluidos, Territorios en Lucha, el Movimiento Evita, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y la Mesa de Organismos de Derechos Humanos.