En el marco de la caída de ventas de combustibles, la nafta y el gasoil volverán a subir desde este jueves 1 de agosto, un 3 por ciento en promedio. Se trata de un nuevo incremento que incluirá el traslado al precio final de la devaluación mensual del peso frente al dólar oficial, del 2%. 

Además, se incluye una actualización del 1% en el impuesto a los combustibles líquidos. El Gobierno aplicará una pequeña suba del tributo, con el objetivo de que no aumentar la presión sobre la inflación.

Algo similar a lo que ocurrió con las tarifas de energía, que se espera su aumento inminente. Como bien se informó, en el mes de agosto también aumentarán las prepagas, los colegios privados, prepagas, peajes y telefonía celular, entre otros servicios. 

De esta manera, tras el aumento que sufrirán en las próximas horas, la nafta súper de YPF pasará de $940 a la zona de los $970 por litro en la Ciudad de Buenos Aires (CABA). Mientras tanto, el gasoil se apreciará de $980 a unos $1.010 por litro.

Considerando lo que subieron los combustibles en el año, ya llevan acumulado más del 126% promedio, muy por encima de la inflación acumulada a junio que es del 83,6%.

Por otra parte, el consumo de combustibles en el país cayó en junio 12,05% interanual y anotó la séptima caída mensual consecutiva, según datos de la Secretaría de Energía de la Nación.

Asimismo, las ventas de naftas y gasoil disminuyeron hasta un 34% en las provincias que limitan con los países fronterizos. En Santa Fe, por ejemplo, se expendieron 112.290,70 metros cúbicos, obteniendo una baja interanual de 6,99%.

Vinculado con el cambio de hábitos de consumo, según los datos de la Secretaría de Energía, en junio el consumo de nafta premium mostró una caída de 20,61% contra junio de año pasado.