El presidente, Alberto Fernández, analiza la posibilidad de disponer más restricciones al turismo y controles sanitarios para detener el avance de la segunda ola del COVID-19.

Según fuentes oficiales, Fernández evalúa firmar un Decreto de Necesidad de Urgencia (DNU) que reduce la frecuencia de los vuelos al exterior, impone un seguimiento de los argentinos que regresan al país y fija, con la acción de la Prefectura y la Gendarmería, mayores controles en los pasos fronterizos, tanto formales como informales con países vecinos.

La medida que tomaría el jefe de Estado apunta a desalentar el turismo de los argentinos en el extranjero y reducir la cantidad de vuelos a una cantidad mínima.

En el mensaje transmitido el viernes por la Cadena Nacional, Fernández dijo que por las nuevas variantes del virus “está totalmente desaconsejado viajar al exterior”, y alertó que "quienes lo hagan, al regresar deberán aislarse y tener cuidados estrictos”.

El DNU que el mandatario analiza firmar en los próximo días obligaría que todos los turistas argentinos que vuelvan al país pasen la cuarentena en hoteles, cuyos gastos correrán por su cuenta. Además, el viajero se hará cargo del costo del hisopado.

“La pandemia no terminó. Debemos extremar los recaudos para que el COVID-19 no nos vuelva a aislar”, advirtió Fernández.