El Gobierno afrontará entre el lunes y el miércoles próximos dos pagos al Fondo Monetario Internacional ( FMI) por un total de casi $1.400 millones.

El lunes le abonará al organismo internacional US$685 millones de amortización y el miércoles otros US$ 691 millones en concepto de intereses, más otros importes menores, en un contexto de escasez estacional de divisas.

La Argentina afrontará estos compromisos ante la entidad que preside Kristalina Georgieva con sus propias reservas, mientras aguarda que le desembolsen u$s5.562 millones de la primera revisión del año, que se prevé para marzo. Esto se da en un marco donde el Banco Central (BCRA) quedó con un saldo vendedor de u$s48 millones luego de un buen arranque a lo largo de las primeras 19 ruedas del mes en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), con el cual había llegado a acumular unos u$s6.000 millones de reservas netas.

Cabe recordar que el pasado 10 de enero, el Gobierno había desembolsado alrededor de US$2.300 millones, de los cuales US$1.200 millones fueron para el FMI y los otros dos restantes a bonistas privados. Ese desembolso generó un descenso de las reservas: aunque se mantienen por arriba de los US$42.000 millones, desde la semana pasada, las reservas totales registran bajas diarias tras el anuncio de recompra de bonos por parte del Tesoro.

El presidente Alberto Fernández, junto a la directora del FMI, Kristalina Georgieva.

Frente a esta situación, para reforzar las arcas del BCRA, en el Ministerio de Economía tratan de apurar créditos tipo REPO de al menos dos bancos internacionales y un fondo soberano por unos u$s2.500 millones, acuerdos que estarían a punto de firmarse. Asimismo, confía en los desembolsos de otros organismos internacionales (BID; CAF y Banco Mundial), el swap con China, así como con el relanzado acuerdo estratégico con Brasil.

En marzo, cuando se discuta nuevamente la marcha del Programa de Facilidades Extendidas, las autoridades argentinas seguramente volverán a pedir al organismo que revea las metas de acumulación debido al efecto de la guerra en Ucrania sobre el precio de los combustibles a nivel internacional.

En este contexto, el impacto negativo de la sequía en la cosecha se transformó también, junto con la inflación, en otra de las grandes preocupaciones para poder conseguir las divisas que necesitan. Sin embargo, hay que tener en cuenta que si el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) queda listo para este invierno, el Gobierno va a poder hacer un ahorro muy importante de divisas por menores importaciones. 

Programa del FMI: cuáles son los próximos pasos

El 2023 es el año con mayor pago de vencimientos según el acuerdo: US$18.382 millones entre capitales e intereses. Sin embargo, pueden ser cubiertos con US$19.000 millones que desembolsaría el FMI si la Argentina cumple con las metas trimestrales pactadas.

Hacia fines de febrero y principios de marzo está previsto que la Argentina retome las negociaciones técnicas con el organismo para la revisión de las metas del cuarto trimestre de 2022. El Gobierno dio por cumplido ese compromiso, pero el  FMI debe realizar la evaluación técnica. Posteriormente, ese entendimiento técnico debe ser tratado por directorio ejecutivo del Fondo, que si la aprueba gatillará el desembolso de unos US$5.400 millones.

Es preciso recordar que el programa con el FMI está estructurado sobre tres bases: la reducción del déficit fiscal, la acumulación de reservas internacionales y la asistencia monetaria al Tesoro. La meta de reservas aparece como la más difícil de alcanzar: sobre este punto, para el 2023, el acuerdo prevé sumar unos US$500 millones en el primer trimestre del año.