El Directorio del Fondo Monetario Internacional ( FMI) anunció que el próximo jueves 13 de junio llevará adelante la octava revisión del programa de Argentina, del cual depende si habrá un nuevo desembolso de 800 millones de dólares. 

Anteriormente, a principios de mayo las autoridades argentinas acordaron con el organismo internacional sobre el cumplimiento de las metas establecidas para el primer trimestre, así como los próximos pasos que seguiría el programa de financiación. Sin embargo, en esta ocasión se mantiene en duda si el organismo aprobará o no el giro de esos fondos. 

En este marco en que se registró una caída de los activos argentinos, el incremento del riesgo país y la liberación del dólar, el Gobierno espera una respuesta positiva de parte de la entidad dirigida por Kristalina Georgieva. En tanto, el desembolso de los 800 millones de dólares podría ser clave para el país. 

En esa línea, la vocera del Fondo, Julie Kozack, destacó en una conferencia de prensa que concedió en Washington que el equipo liderado por el ministro de Economía, Luis Caputo, junto al del Banco Central, Santiago Bausili, logró cumplir con las metas y plazos definidos anteriormente.

En tanto, el organismo aseguró que el superávit fiscal primario se detectó en las cuentas públicas, así como una mayor reducción de la inflación que superó lo previsto.

Por otro lado, la funcionaria estadounidense advirtió sobre dos items en específico, que preocupan a los accionistas del FMI. El primero, se trata de la "necesidad de aumentar la asistencia social para apoyar a los más vulnerables, asegurando que la carga del ajuste no caiga desproporcionadamente sobre las familias trabajadoras y recomendando a las autoridades que hagan esfuerzos para aumentar la asistencia". 

En segundo lugar, la vocera enfatizó en "la necesidad de trabajar para ampliar el apoyo político a la estabilización y reforma macroeconómica", como vienen haciendo desde 2022 al firmarse el actual programa. 

En sintonía, el proyecto de Ley Bases y el paquete fiscal está bajo la lupa del FMI, puesto que hasta el momento, la gestión de Javier Milei no logró obtener sanción de ninguno de estos dos hasta el momento (el miércoles es el debate). 

El próximo paso que anticipó el Gobierno es el de las restricciones, con el objetivo de operar con dólares financieros. De esta manera, la segunda etapa del plan oficial que se acordó con el organismo internacional incluye un esquema en el que el dólar estadounidense conviva con el peso y que ambos compitan de manera libre, es decir, una primer instancia hacia la dolarización.