Dengue: Para Quirós, la intervención del Ministerio de Salud nacional “debería ser más intensiva”
El ministro de Salud porteño marcó sus diferencias con la forma en la que se manejó la cartera que conduce Mario Russo ante la epidemia. También criticó la falta de repelentes.
El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, sostuvo que la intervención del Ministerio de Salud de la Nación ante el brote histórico de dengue que afecta al país “debería ser más intensiva”.
“Creo profundamente en el rol del Ministerio de Salud de la Nación. Debiera tener además del rol de rectoría, uno de cooperación, de explicación, de comunicación y apoyo a los que más lo necesitan. Sobre todo en momentos donde la mayoría de las provincias están con este problema”, consideró el funcionario porteño.
Según apuntó, el ministro de Salud nacional, Mario Russo, “dice que el rol del Estado nacional es de rectoría y el rol de las actividades concretas y prácticas es de las jurisdicciones”.
En cambio, Quirós advirtió que “el problema de las epidemias es que requieren una cooperación muy intensiva entre los gobiernos y la sociedad” y subrayó que “la comunicación es esencial”. “Ese es el rol del Ministerio de Salud en un momento de catástrofe social. Que haya una voz transparente, clara, precisa”, insistió en una entrevista radial.
En este marco, también cuestionó la falta de repelentes. “No debería haber ocurrido. Con una decisión simple que fue liberar los trámites en la Aduana inmediatamente empezaron a llegar los aviones con repelentes”, recalcó.
También instó a “definir con claridad cuál es la política pública de la vacuna, si bien hay cierto consenso en que debe aplicarse de forma segmentada y focalizada en los lugares donde hay tránsito muy intenso como en el norte”.
Fase final de la epidemia en la CABA
Asimismo, Quirós reiteró que la Ciudad de Buenos Aires atraviesa “la fase final de la epidemia” y enfatizó que para prevenir el dengue “es más importante lo que uno hace dentro de la casa”.
“Si tenés una enfermedad que cíclicamente viene en enero, febrero y marzo y nos da nueve meses para recomponernos, cada año deberíamos ser superadores. Cada ciclo es una oportunidad para aprender. Por eso trabajo tanto en la comunicación porque es muy importante que gobiernos y sociedad en cooperación aprendamos los detalles de este mosquito en particular”, manifestó.
Añadió que al Aedes aegypti, el mosquito transmisor de la enfermedad, “no pica en la oscuridad y tampoco al rayo del Sol”. “Le gusta las zonas húmedas, oscuras, frescas para esconderse. Sale a volar desde la madrugada hasta media mañana y luego en el atardecer”, completó.