Los departamentos de Rosario y la capital santafesina ingresaron en la categoría de Alarma Sanitaria, de acuerdo a la disposición del Ministerio de Salud de la Nación. Así lo determinó el gobierno provincial, por lo que se suspenderán las clases presenciales en todos los niveles en ambos territorios.

Dicha clasificación se estipula cuando grandes aglomerados urbanos, departamentos o partidos de más de 300.000 habitantes poseen una incidencia definida como el número de casos confirmados acumulados de los últimos 14 días por 100.000 habitantes, que es igual o superior a 500. Además, se tiene en cuenta el porcentaje de ocupación de camas de terapia intensiva, que se ubica por encima del 80%.

Otras medidas en la provincia

La suspensión de las clases presenciales en los departamentos Rosario y La Capital se complementaría con mayores restricciones a la circulación, como así también de actividades recreativas y comerciales.

De hecho, el gobernador Omar Perotti admitió el lunes que analiza implementar nuevas medidas debido al "alto nivel de contagios" de coronavirus en la provincia. "Es un momento duro, un momento difícil y cada uno de ustedes vale en la actitud y en la responsabilidad social que asumamos para no seguir generando más circulación, que es más contagios y es más internación", comentó.

Perotti también se mostró preocupado por el alto porcentaje de ocupación de camas de terapia intensiva en Santa Fe. Si bien destacó la llegada de "17 respiradores más", advirtió que "todo lo que se amplió (del sistema de salud), nos lo consumimos".

"Esto significa que el nivel de contagio es alto, hay que cuidarse mucho. Tendremos seguramente que estar analizando algunas acciones para quitar más circulación para poder ayudar a nuestro sistema de salud", anticipó el gobernador santafesino.