Una joven de 25 años fue abusada sexualmente por segunda vez por el mismo grupo de hombres en la provincia de Córdoba. El domingo 18 de septiembre, la víctima fue encontrada semi inconsciente por la Policía a un costado de una de las avenidas más transitadas de la capital provincial. Luego se determinó que los atacantes son conocidos de la víctima y ya la habían violado hace cuatro años, desde entonces la acosaban.

B., como se la llamó para proteger su privacidad, sufrió una fuerte golpiza que le provocó la fractura de la cadera, por lo que se encuentra internada en el Hospital de Urgencias de la Ciudad de Córdoba.

La chica y su familia habían presentado 28 denuncias ante la Justicia cordobesa por una serie de incidentes que van desde violaciones a la restricción de acercamiento, hasta amenazas y golpizas pero los sospechosos nunca fueron detenidos.

El 18 de septiembre, un automovilista dio alerta a la Policía porque vio a una chica herida al costado de la Avenida Circunvalación. Cuando arribaron los uniformados, B. estaba prácticamente inconsciente, golpeada y presentaba varios cortes.

Más tarde, los estudios médicos revelaron que fue violada, le fracturaron la pelvis y mutilaron su lengua al arrancarle un piercing. Ella emocionalmente está mal. La tienen que operar y está toda golpeada”, reveló Jésica, la hermana de la víctima.

Desde entonces, el caso quedó a cargo de la fiscal Alicia Chirino de Delitos Contra la Integridad Sexual del Primer Turno. Inmediatamente, la fiscal le tomó declaración a la víctima, dispuso una custodia permanente y ordenó la imputación y orden de detención contra tres sospechosos.

No fue la primera vez

Los familiares denunciaron que los presuntos atacantes son viejos conocidos del barrio en el que viven y que hostigaban a la joven desde hace al menos cuatro años, cuando abusaron de ella por primera vez. En ese momento, B. tenía 21 años.

“Esa primera violación ocurrió en una de las cenas que tenían como amigos. Después de que ella se presentara en la Justicia, este grupo que cada vez son más, en venganza comenzaron a hostigar a toda nuestra familia y violaron dos veces más a mi hermana”, contó Jésica.

Esa primera denuncia por la violación de hace cuatro años fue presentada en la fiscalía a cargo de Chirino, la misma fiscal que investiga este último ataque sexual sufrido el pasado domingo: “La primera denuncia quedó en estado sumarial”, confió a El Destape el abogado Carlos González Quintana, que representa a B. junto a sus socias Paula Pedernera y Dania Villanueva. El trío solicitará a la fiscal Chirino que los acepte como querellantes, una vez que B. se recupere de las lesiones recibidas en el último ataque sexual.

Jésica contó además que “una de esas personas, que reincide en las tres violaciones le juró a mi hermana que la iba a violar cuántas veces quisiera y que la iba a terminar matando, que es lo que intentó el domingo”. La hermana de B. también denunció que esta patota estuvo involucrada en la muerte de otra chica y que “no estuvieron ni una semana presos”.

“Mi hermana no podía ir a ningún lado, que la seguían, la buscaban y la golpeaban. Estaba haciendo un curso, mi mamá la acompañaba, se quedaba cuatro horas para que no la acosaran. Y cuando salieron, vino uno de los tipos y le pegó a mi hermana, la mandó a terapia intensiva y no fue preso ni nada”, remarcó Jésica.

“Este grupo vive en el mismo barrio que nosotros y nunca respetaron la orden de restricción que les pusieron. Hicieron lo que quisieron, como quisieron y cuando quisieron. Estamos desprotegidos, reveló la hermana de la víctima.

En el transcurso de 4 años la familia presentó múltiples denuncias, pero ninguna avanzó. “Esperamos que se investigue la razón por la cual a pesar de haber más de 20 denuncias previas, los operadores judiciales no consiguieron evitar el terrible desenlace que terminó con una mujer violada en grupo, lesionada y arrojada en plena Circunvalación al borde de perder su vida”, acusó el abogado González Quintana.

El letrado amplió aún más los detalles de las heridas que sufrió su clienta e indicó que sufrió múltiples escoriaciones en las piernas y el torso, producto del arrastre en el pavimento. De acuerdo con las fuentes judiciales, los tres detenidos hasta el momento no declararon y están en proceso de asignar abogados. En tanto, la familia aseguró que los agresores serían 7 en total.