Un preso se cosió la boca tras ser golpeado y violado por supuestas órdenes del director del penal
Un recluso de la cárcel de la localidad bonaerense de San Nicolás de los Arroyos fue ultrajado tras haber acusado al alcaide del instituto penitenciario. IMÁGENES SENSIBLES.
Un preso denunció la venta de drogas en el penal de San Nicolás y los efectivos del pabellón lo molieron a golpes, según relató el propio recluso. Además, como no le daban de comer, tras la grave denuncia contra el director de la cárcel, se coció la boca en forma de protesta.
El recluso se llama Leonardo, quien junto a su compañero Daniel, denunciaron la venta de estupefacientes dentro del penal. Tras la denuncia, la Justicia decidió trasladarlos para evitar que su vida corra peligro.
Al hombre le habían entregado la droga para venderla dentro del presidio. No obstante, los demás reclusos y los guardia cárceles lo acusaron de habérselas consumido. Por su parte, los "dealers" le propinaron una terrible golpiza. Este episodio sucedió luego de que Daniel mostrara a Crónica HD cómo se vendía "merca" en los pabellones.
El preso había sido beneficiado con prisión domiciliaria, pero luego de dar la nota a este medio, se la revocaron. Según denunció, los guardia cárceles lo habían mandado a violar y ultrajar de miles de maneras aberrantes.
Hasta el momento, la Justicia no mandó a allanar el complejo penitenciario, ni tampoco investigó o apartó de sus mandos a los supuestos guardias corruptos.
"Ordenó que me mataran a golpes": la grave denuncia del preso contra el director del penal
Leonardo, por su parte, se coció la boca en un claro gesto de "huelga de hambre", luego de que el director del instituto, Joaquín Ferreira, lo echara del pabellón en donde se encontraba. El alcaide argumentó su decisión diciendo que Leonardo y Daniel habían hecho "fuertes declaraciones en Crónica".
"Está en peligro mi vida", manifestó Leonardo en un video que grabó luego de haber sido violado y torturado por otros convictos y por personal de la penitenciaría.
"Desde el pabellón 12 me habían amenazado de que no podía hablar con el juzgado o con los medios", contó Leonardo, quien también acusó al director Ferreira. Él fue el "ordenó que me roben el celular, que me mataran a golpes y que me den pinchazos. Me ultrajaron, me estrangularon y dejaron inconsciente", concluyó el preso.