Quedate quieto porque te vuelo: le dijo el delincuente apuntándole a la cabeza para robarle la camioneta
El comerciante estaba con su esposa y su sobrino. La noche anterior había regresado de Luna de Miel. Los ladrones se llevaron tres vehículos más.
Un comerciante, junto a su esposa y su sobrino, estaban llegando al local en el que trabaja cuando fue interceptado por un grupo de delincuentes. Los asaltantes armados lo obligaron a bajarse de la camioneta le sacaron todo lo que tenía y escaparon. Con el vehículo robaron tres autos más. “Me decía: ‘Dame el auto, quédate quieto porque te vuelo’”, recordó la víctima.
Todo ocurrió este fin de semana en la intersección de las calles Castelli y Saavedra, en la localidad bonaerense de Ciudadela, a metros de la avenida General Paz.
“Trabajo en una panadería, estábamos estacionando en camioneta porque habíamos vuelto del mercado y nos cortó un Vento. Enseguida me puso un arma de calibre grande en la cabeza, nos robó todas las pertenencias: plata, reloj, celulares y la camioneta, que cuando fuimos a hacer la denuncia a la comisaría nos enteramos que con eso robaron tres autos más durante la tarde”, dij. a los medios Pablo que viajaba junto a su esposa y a su sobrino de 22 años.
Todo quedó registrada por una cámara de seguridad de la zona. Se ve cuando la víctima estaba estacionada hasta que llegaron los asaltantes en otro auto. De él descendió un ladrón que le apuntó con un arma, mientras sus cómplices obligaban a bajarse al resto de los pasajeros.
“Quería el celular, más plata, le dije que no había más nada. Me palpó y estaba desesperado. Aparentemente eran más y a la tarde andaban con mi camioneta, el Vento y otros tres autos, así que supongo que eran cinco delincuentes”, señaló Pablo que recién llegaba de su Luna de Miel.
“Me decía: ‘Dame el auto, quédate quieto porque te vuelo’”, recordó y añadió: “Yo le dije ‘ahí tenés la camioneta, llevátela’. Cuando salieron chocaron el Gol que estaba estacionado adelante y se fueron”.
“Hoy te pegan un tiro por nada, por lo que sea, para mí la vida vale más que la plata, que la camioneta, por eso se las entregué. Mi esposa quedó paralizada, reaccionó al rato, cuando llegamos a la comisaría, ni se me pasó por la cabeza resistirme”, sostuvo.
“Llegamos a la noche y al otro día nos robaron. Por suerte no estábamos con los chicos . Ahora hay que seguir trabajando”, sostuvo.