Un padre entregó a su hijo de 16 años a la Policía luego que se enteró que había sido partícipe de dos robos con armas blancas en la localidad de City Bell, partido de La Plata.

“Soy el padre y vengo a entregar a mi hijo por lo que hizo. Que pague”, dijo el hombre el miércoles pasado alrededor del mediodía cuando se presentó en la Seccional N°13 acompañado de su hijo al que tomaba por la fuerza del brazo.

Según contó el hombre, su hijo de 16 años estaba acusado de perpetrar dos robos violentos con armas blancas en comercios de la zona, en complicidad con otro joven de la misma edad.

Ante esa escena, los oficiales de la policía iniciaron un procedimiento para verificar los datos y comprobaron que el joven estaba involucrado en los delitos ocurridos en dos locales de la calle 489 entre 15 y 15 bis, y que además “era buscado intensamente desde hace varios días”.

Aunque el hombre solo advirtió a la policía por dos circunstancias delictivas, descubrió en la comisaría que el joven estaba involucrado en el robo de un kiosco en la intersección de las calles Belgrano y 501, el pasado 9 de septiembre.

Aunque el padre del menor se mostró mal al enterarse que su hijo es un delincuente y que había sido autor de más de dos robos, aseguró con firmeza que “debe estar tras las rejas por los hechos que cometió”.

No obstante, el cómplice que participó de los robos está prófugo, en tanto el adolescente entregado por su padre quedó detenido a la espera de que la fiscalía de menores tome jurisprudencia en el caso.

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