"No fue un hecho político", el abogado de la familia del colectivero asesinado consideró que el crimen fue un episodio de "inseguridad"
El letrado que representa al entorno familiar de Daniel Barrientos, ratificó la teoría de que el crimen del chofer de colectivo de la línea 620 fue en el marco de un intento de robo.
El abogado de la familia de Daniel Barrientos, el colectivero asesinado este lunes mientras manejaba la unidad de la línea 620 en la localidad bonaerense de Virrey del Pino, sostuvo que el crimen fue una situación cotidiana de "inseguridad".
"No fue un hecho político, no tiene una circunstancia rara. Esto es lo que sucede todos los días en La Matanza. Hay una cuestión de inseguridad de la que somos víctimas diariamente", señaló el abogado Alfonso Franze, en declaraciones a la prensa desde la puerta de los Tribunales de La Matanza.
El letrado informó que se reunió con el fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Homicidios de La Matanza Gastón Duplaa, quien indagará esta tarde al primer detenido por el crimen de Barrientos (55), identificado como Alex Gabriel Barone, un joven de 19 años con antecedentes penales por un robo agravado cometido en 2019.
Este martes a la tarde se concretó la captura del segundo sospechoso, quien sería primo de Barone y podría ser indagado en las próximas horas en el marco de la investigación.
Respecto de la detención del primer imputado tras las rejas, Franze dijo que fue una mujer quien "hace el reconocimiento positivo, dice que esa fue la persona que le retiró sus pertenencias en el colectivo".
El letrado precisó además cómo fue detenido Barone: "Unos policías se cruzaron en el camino de la ruta 3 con un Chevrolet Corsa gris y esta persona les pareció sospechosa. Como tenía un problema en la patente, se realiza la investigación y se lo detiene a posteriori".
Sobre otros eventuales partícipes del crimen de Barrientos, el letrado dijo que se busca a "un prófugo" y que no consta en la causa que haya habido más involucrados, aunque se aguardan más testimonios para avanzar en la pesquisa.
"Solo declararon tres de los nueve testigos" que iban en el colectivo, añadió el abogado, y luego admitió que "no se puede decir que Barone esté completamente vinculado a la causa hasta que haya más elementos".
En ese sentido, el representante legal de la familia Barrientos remarcó que no consta en la causa la existencia de otros delincuentes en un auto de apoyo y reiteró que el hecho "no tiene una circunstancia rara", tal como lo sugirió el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, quien en declaraciones a la prensa realizadas a raíz del ataque a golpes que sufrió ayer por parte de compañeros de la víctima durante una protesta, dijo que el caso le resulta "llamativo", ya que "los patrones no coinciden con un asalto típico a una línea de colectivo".
No obstante, Franze dijo estar "tranquilo" con la actual investigación del fiscal Duplaa, y aportó algunos datos de la pesquisa, entre ellos que se aguarda un peritaje entre al arma calibre 40 que se habría utilizado en el hecho y que fue encontrada en la zona aledaña a la escena del crimen con un proyectil secuestrado en el colectivo.
"La pistola que se encontró es un arma cara y poderosa. Es un calibre 40. En esta investigación hay un plomo que en principio atravesó a Barrientos y pegó en el colectivo. Esto va a llevar a una pericia para ver si ese plomo salió del arma homicida. Entiendo que se tomaron huellas pero que todavía no arrojaron resultados. La investigación está en manos de una fiscalía que tiene mucha experiencia en esto", dijo.
En tanto, los restos del colectivero fueron velados en la sala funeraria "Nuestra Señora del Valle", ubicada en el kilómetro 20 de la ruta 3, de Gregorio de Laferrere, y serán inhumados en el cementerio de González Catán.
El crimen del colectivero
El crimen ocurrió ayer pasadas las 4.30 cuando dos delincuentes abordaron el colectivo en la parada ubicada en el cruce de las calles Bernardino Escribano y Cullen, del barrio Vernazza.
Bajo amenazas con armas, los ladrones le robaron la mochila con pertenencias a una mujer que iba senada adelante con su hija discapacitada y luego dispararon contra el chofer a pesar de que no ofreció resistencia.
Entre los pasajeros había un efectivo de la Policía de la Ciudad que les dio la voz de alto y se tiroteó con los asaltantes, aunque no logró evitar que huyeran.
Barrientos murió en el lugar, mientras que los peritos que trabajaron en la escena hallaron una vaina servida en el panel al lado del chofer y un plomo deformado, como así también ocho vainas servidas calibre 9 milímetros en el suelo del colectivo y otras seis abajo de la unidad a la altura de la puerta.
También se halló en la zona un Fiat Siena quemado que se investiga si fue empleado por delincuentes que pudieron haber actuado de apoyo en el asalto.
Luego del crimen, choferes de 86 líneas de colectivos de la zona oeste del conurbano, convocados por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), iniciaron una medida de fuerza y realizaron cortes en reclamo de seguridad sobre la ruta 3 y la avenida General Paz, a la altura de Lomas del Mirador.
Fue allí donde el ministro Berni fue agredido por los choferes cuando se acercó para dialogar con ellos e informarles que había un detenido.
El funcionario provincial recibió como respuesta insultos, pedradas y golpes de puño, por lo que debió ser retirado del lugar por personal de Infantería de la Policía de la Ciudad y asistido en el Hospital Churruca por una fractura de cráneo y hundimiento de la órbita ocular.