Rosa del Milagro Sulca, de 48 años, estaba "muy deprimida" por una serie de robos que sufrió en su casa ubicada en la zona sudeste de la capital salteña, donde fue hallada asesinada de 17 puñaladas, apenas unas horas después de que llamara al 911 para pedir auxilio porque la estaban "matando".

La maestra de grado trabajaba en la Escuela Ejército Argentino de Villa Mitre, barrio donde vivía sola en la calle Amalia Aybar al 1400. En la noche del martes, una vecina avisó a la policía de que algo raro había pasado con Rosa, ya que no había cumplido su rutina habitual y las luces de su casa estuvieron prendidas todo el día.

Cuando los efectivos ingresaron a la vivienda encontraron a la docente muerta y con signos de haber sido apuñalada.

El fiscal penal 3 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas en feria extraordinaria, Gustavo Torres Rubelt,  pudo comprobar en la investigación que la víctima sufrió una muerte violenta, con lesiones de arma blanca en la parte superior del torso.

Además el funcionario comprobó que la víctima realizó un llamado al Sistema de Emergencias 911 a las 2.37 del martes para pedir ayuda porque la estaban “matando”, según ella misma le comunicó a la operadora.

No obstante, otra voz femenina se puso inmediatamente al teléfono e intentó desestimar el llamado al decir que se trataba de su tía y que tenía problemas de salud.

Según el informe policial, a raíz de ese llamado los efectivos de la fuerza se trasladaron al domicilio, tocaron la puerta y el timbre en forma insistente, intentaron llamar a la persona que pidió auxilio, aunque ante la falta de respuesta, se retiraron.

El testimonio de una vecina apuntó a dos adolescentes que podrían estar involucradas en el crimen, según reprodujo El Tribuno. Se trata de dos chicas, quien la mujer identificó como las hijas de otra residente, Claudia Flores, y que "siempre iban a su casa (por la vivienda de Rosa) con la excusa de que las ayudara a hacer la tarea y le terminaban robando cosas".

La señora afirmó que estaba al tanto de esa información porque una mañana se encontró a Rosa cuando bajó a comprar el pan, la notó "muy deprimida" y ella le "habló acerca de las dos chicas". "Un día las descubrió llevándose una notebook y les reclamó para que se la devolvieran, porque era su herramienta de trabajo. Sacaron un cuchillo y la quisieron lastimar, contó que le dijeron que si hacía la denuncia la iban a cagar matando", indicó la mujer.

Por otro lado, aseguró que la maestra "había denunciado en la Comisaría N°4  que varias veces habían entrado a robarle y que ellos (por los policías) no hicieron nada para prevenir semejante tormento que terminó sufriendo".

Rosa Sulca fue brutalmente asesinada en su casa (Facebook).

“Dios quiera que se haga justicia, mataron a una mujer inocente que había alertado en más de una oportunidad que la querían matar, lamentó y luego agregó: "Las chicas tienen antecedentes de vender droga junto a su madre en la plaza del Manjón y la plazoleta del barrio, su madre estuvo detenida y quedó en libertad".

A raíz de este testimonio, el fiscal ordenó allanar la casa de Flores, donde quedaron detenidos una pareja conformada por una adolescente de 17 años y un joven de 19, que serían alumnos de Rosa y serán imputados por el delito de homicidio criminis causa, con alevosía.

La foto de los acusados del crimen fue difundida en redes sociales.

El procurador general de la Provincia, Abel Cornejo, creó este jueves la tercera Unidad Fiscal de Colaboración por el homicidio de Sulca, que la integran los fiscales penales Pablo Rivero y Verónica Simesen de Bielke.