Los rugbiers franceses acusados de abuso sexual pueden regresar a Francia, aunque antes deberán someterse a una pericia psiquiátrica por pedido de la querella. Los tres fiscales que entienden en la causa los autorizaron. Este martes en una audiencia a cargo jueza de Garantías, Eleonora Arenas se tratará el pedido de los abogados de la denunciante de 39 años.

El fiscal adjunto en lo penal, Gonzalo Nazar, comunicó esta decisión y puso condiciones para Hugo Auradou y Oscar Jegou. Deberán presentarse en el consulado argentino cada vez que lo requiera la justicia, fijar un domicilio legal y virtual. para tener donde ubicarlos.

Los deportistas estuviero. primero estuvieron detenido. con prisión domiciliaria y tobillera electrónica en una casa de Mendoza, donde estaban acompañados por sus familiares. A mediados de agosto, la fiscalía decidió que ambos sigan imputados, pero les otorgaron la libertad pero no podían salir del país. 

Los abogados que representan a la denunciante presentaron un pedido de recusación del fiscal Darío Nora y la jefa de Fiscales de la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Identidad Sexual, Daniela Chaler, “por violencia moral y falta de objetividad”.

En el escrito, los querellantes Mauricio Cardello y Natacha Romano subrayaron que los representantes del Ministerio Público Fiscal “colocaron en riesgo el proceso y en desprotección a la denunciante” al dictaminar a favor de los deportistas en cuento al levantamiento de las condiciones impuestas como la prisión preventiva y, en especial, sobre la medida de la prohibición de la salida del país.

Los fiscales a cargo de la investigación, para dejar en libertad a los acusados, valoraron que los estudios sobre su estructura psíquica de dieron “favorables”, que no presentaron “trastornos en la faz sexual” y tampoco mostraron “impulsividad”. Además consideraron que hubo contradicciones en el testimonio de la denunciante. 

A esto sumaban las dudas sobre las lesiones físicas. En el escrito, la denunciante describió haber sido golpeada, estrangulada y mordida” por los imputados. Sin embargo, la evaluación médica forense presentó resultados que no coincidían con la gravedad de las agresiones descritas.

Desde la querella insisten con que el abuso fue real, que la mujer se dio cuenta de que había sido una violación cuando llegó a su casa y advirtió los golpes, y que durante la conversación con su amiga no había tomado dimensión de los hechos. También piden que el caso sea investigado con perspectiva de género.

La denunciante presentó un duro escrito en el que afirmó: “Me sacaron las ganas de vivir”.

Crónica Policiales: todas las noticias de hoy