"Hice lo que hice en un mal momento de mi vida", confesó Máximo Alberto Vallejo (36) durante el debate del juicio en que fue condenado a 18 años de prisión por violar en al menos cuatro oportunidades y dejar embarazada a la hija de su pareja (36), quien también fue juzgada y recibió 13 años de pena

Las jornadas estuvieron a cargo del Tribunal Oral Criminal (TOC) 6 de Morón, integrado por los jueces Alejandro Omar Rodríguez Rey -presidente-, Cristian Ariel Toto y Mariela Susana Moralejo Rivera, ambos vocales; y la intervención de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicios N°10.

Vallejo recibió 18 años de cárcel por los delitos de "abuso sexual simple agravado, siendo dado contra una menor de 13 años de edad, aprovechando la situación de convivencia preexistente con el mismo reiterado en al menos dos oportunidades y en concurso real del delito de abuso sexual con acceso carnal en dos oportunidades y corrupción de menores agravado". La mujer, en tanto, le dieron 13 años de prisión con la misma calificación legal con el agregado de "partícipe necesario por omisión por no haber evitado los abusos".

La mujer fue detenida en pleno debate oral al momento de la sentencia porque había presenciado las jornadas del juicio en libertad, mientras que Vallejo no estuvo en los debates.

El Tribunal dio por acreditado que la pareja convivía en una casa en el partido bonaerense de Merlo y que, al aprovechar que estaba en su cuidado, él había abusado en al menos cuatro oportunidades de la hijastra, dos de ellos con acceso carnal.

El primero de los abusos esclarecidos ocurrió cuando tenía de 8 a 9 años y su madre trabajaba afuera del domicilio. En esa oportunidad, el hombre estaba en la vivienda de la calle Constitución al 100 de Merlo, al cuidado de la nena y abusó de ella sexualmente.

Seguidamente, en el segundo de los ataques, al final del año 2017, la niña fue violada por el padrastro en otra casa de la calle Cámpora al 100 de Merlo norte.

Según el fallo, las agresiones fueron sufridas cuando tenía entre 8 y 12 años y su madre estaba al tanto de lo que estaba pasando pero no hizo ninguna denuncia.

La niña pudo contarle lo ocurrido a su abuela que comprobó del embarazo que llevaba de varias semanas y efectuó la denuncia correspondiente en la comisaría de la mujer de Merlo.

La víctima tuvo un bebé y junto a la abuela y la orientación debida de la asistencia social y ayuda judicial decidió darlo en adopción.