Úrsula Bahillo de 18 años fue asesinada este lunes por la noche en la ciudad bonaerense de Rojas por Matías Ezequiel Martínez, su exnovio, y policía bonaerense. La joven, víctima de femicidio, fue encontrada muerta cerca de las 20.30, entre pastizales de un campo, a la altura del paraje Guido Spano, a unos 13 kilómetros a las afuera de la ciudad.

La brutalidad del crimen y los antecedentes de violencia generaron una gran indignación por parte de varios vecinos de Rojas, una localidad de no más de 20 mil habitantes: se movilizaron hasta la comisaría municipal para acompañar a la familia de Úrsula en su reclamo de justicia. 

"Este hijo de puta me la manoteó y la apuñaló, cuando ella pidió auxilio la Policía no actuó. ¿Por qué esperaron a que mi hija estuviera en una morgue?", se preguntó conmocionada Patricia, la madre de la joven.

La mujer relató que ella y su marido se enteraron que Úrsula era víctima de violencia de género por parte de Martínez (25) el 9 de enero pasado, cuando un matrimonio amigo que conocía la situación de su hija se acercó a ellos para alertarlos "porque iba a aparecer muerta".

Los mensajes en sus redes sociales

Además de las denuncias que Bahillo radicó contra su ex pareja con la intención de alertar a las fuerzas policiales sobre su crítica situación, la joven también utilizó las redes sociales para comunicar lo que le pasaba. 

En twitter, la joven ya advertía sobre su situación.



El acusado estaba con carpeta psiquiátrica desde septiembre del 2020 y otras 14 denuncias de otras mujeres con las que había tenido alguna relación en la ciudades de Zárate y San Nicolás, en donde se había desempeñado como policía.

El femicidio se descubrió tras el llamado al 911 de un tío del propio imputado en el que refirió que creía que su sobrino había matado a una joven porque le confesó en un llamado que "se había mandado una cagada".

Uno de los mensajes que publicó en Instagram. 


Al llegar al lugar, la policía se encontró con la chica asesinada y al agresor malherido dentro de su auto, un Peugeot 307. El sospechoso intentó escapar a pie por los pastizales y el campo, pero de inmediato fue reducido y apresado.

Dentro del auto, los investigadores hallaron una cuchilla de carnicero con mango blanco y manchas hemáticas, que se cree fue el arma homicida y quedó secuestrada para peritajes.

Uno de sus últimos tweets el mismo día del femicidio. 

Por su parte, algunas amigas de la víctima publicaron capturas de pantalla con mensajes de la propia Úrsula en los que, entre otras cosas, contaba: "Me re cagó a palos mal", " siete meses me pegó", "me callé siempre" y "hasta que me vi muerta, por eso lo denuncié".