“QUE PELEEN, SINO QUE CORAN (sic)”, decía una nota que yacía entre las ropas de un cadáver acribillado a tiros, que estaba maniatado con los ojos vendados rodeado por nueve vainas servidas. Este crimen, de tinte mafioso, se convierte en el número 90 en Rosario y el Gran Rosario en lo que va del año, según datos oficiales del Observatorio de Seguridad Pública.

El macabro descubrimiento a manos de la Policía de Santa Fe tuvo lugar durante la madrugada del martes, en la calle Esmeralda al 3900 en el barrio Tablada. La casa frente a la cual estaba el cuerpo sin vida también había sido baleada.

Poco después, la fiscal de Homicidios Georgina Pairola se hizo presente en la escena del crimen.

La nota con el mensaje mafioso que fue encontrada en la escena del crimen.

 "Era una persona que en principio estaba con los ojos vendados. Tenía también un cabestrillo de inmovilizacion y con esa tira tenía sujetado el otro brazo", detalló Pairola, en Radiópolis (Radio 2). 

Además, la investigadora confirmó que el cuerpo presentaba nueve orificios de arma de fuego. No obstante en las próximas horas habrá que determinar si se trata sólo de heridas de ingresos o si también hay marcas de salida.

Entre las prendas de la víctima se secuestró un papel que contenía un mensaje intimidatorio. Desde fiscalía intentan determinar si fue dejado por los sicarios o si la víctima debía dejar esa amenaza en otro lugar. La particularidad es que el texto fue escrito en una hoja con los resultados de los análisis que alguien se realizó en el Cemar. Mientras tanto, se desconoce la identidad del cuerpo encontrado.

Más homicidios en una Rosario violenta

Cabe destacar que el hecho ocurre a menos de 24 horas del hallazgo del cadáver de Milton Nahuel Gordillo, que estaba desaparecido desde el jueves pasado, con otra investigación también a cargo de la fiscal Pairola.

Fueron cuatro días de búsqueda incesante de su familia hasta que el lunes se confirmó que el adolescente de 17 años fue hallado muerto a la vera de la Ruta 18, en la zona Sudoeste de Rosario . El cuerpo presentaba varias heridas de arma de fuego y se secuestraron 23 vainas servidas de dos calibres distintos: lo que hace presumir que fue ejecutado con dos armas diferentes.

El cuerpo sin vida de Gordillo estaba cubierto con una sábana blanca y alrededor había 23 vainas servidas. De esos casquillos, 17 eran calibre 9 milímetros y los restantes, de un arma de fuego calibre .22 largo.

El cuerpo de Milton tenía impactos en el tórax, en el abdomen, en la espalda, en los glúteos y en el brazo derecho, según el trabajo del gabinete criminalístico en la escena del crimen.

La fiscal Pairola se hizo presente en el lugar y ordenó la toma de testimonios, relevamiento de cámaras en la zona y envió a peritar las vainas encontradas. 

Crónica Policiales: todas las noticias de hoy