Empresario descuartizado: declaró la mujer trans que pasó 23 días detenida sin pruebas en su contra
Su hermano la señaló como la dueña de la valija donde se hallaron los restos. Al ser detenido él mismo la desvinculó. Sus días tras las rejas.
Nicol Alma Chamorro, la mujer trans que estaba detenida en la causa que investiga el crimen del empresario Fernando Pérez Algaba, dijo luego de pasar 23 días en prisión: “Yo no entendía nada”. Fue liberada el viernes pasado, luego de que el juez hiciera lugar a un pedido de la fiscalía.
Chamorro fue la primera detenida del caso, por ser la supuesta dueña de la valija donde se hallaron los restos del cuerpo del empresario. La imputaron como partícipe secundaria en el asesinato.
Según la mujer, el 26 de julio fue arrestada sin que se le expliquen los motivos. “Yo no entendía nada. ‘Quiero saber por qué me van a detener’, les dije. ‘Eso te lo va a decir el fiscal’, me contestaron. Comprendí los motivos por la información y las fotos que publicaban los medios y por lo que me explicaron mis abogados”, relató Chamorro en una entrevista a A24.
Chamorro y sus abogados, Leonardo Cáceres y Marcelo Ponce, informaron que la noche de su arresto ella estaba en la casa de su hermana, ya que se encuentra en situación de calle.
“Lo principal es que estoy libre y se está haciendo Justicia porque yo soy inocente. En mi vida haría eso. La gente que me conoce sabe la clase de persona que soy. Fue algo muy feo todo esto”, contó Chamorro que estuvo detenida en la Alcaidía Departamental Roberto Pettinato de La Plata y luego en el penal de Melchor Romero.
“Apenas entré las chicas me recibieron muy bien. Me contuvieron mucho. Aparte nos conocemos de la calle, de la vida. No me puedo quejar: me dieron ropa para bañarme, me maquillaron, me sentí cómoda y tranquila”, dijo Chamorro.
Ponce informó que, desde un comienzo, la familia de Chamorro aseguró que ella se había robado la valija donde luego aparecieron las extremidades de Pérez Algaba. “Por ese motivo siempre estuvo involucrada”, dijo.
El miércoles 16 de agosto, el hermano de Chamorro, Luis Alberto Contrera, confesó su participación en el crimen y despegó del caso a Nicol.
Con las siguientes detenciones, entre ellas las de Maximiliano Pilepich y Nahuel Vargas, sospechados como los asesinos de "Lechuga", se comprobó que Chamorro no está vinculada con el crimen.
A Chamorro se le había atribuido inicialmente ser la dueña de la valija en la que se hallaron los restos de la víctima y por eso se convirtió en la primera detenida. El fiscal ahora tomó en cuenta los resultados de las pericias científicas de muestras levantadas en su domicilio que dieron resultado negativo.
Al fundamentar el planteo, el fiscal Domínguez escribió que se basaba en "los nuevos dichos del ahora imputado Luis Alberto Contreras que se contraponen a los narrados al inicio en su calidad de testigo, como así también los resultados periciales efectuados sobre muestras obtenidas en el domicilio de la encartada".
"Entiendo que no se dan, por ahora, los requisitos para continuar la cautela oportunamente dispuesta sobre la imputada, por lo que solicito se disponga su inmediata libertad", finalizó. El juez ordenó la liberación.