Edgardo David Bravo, ex Intendente de la ciudad pamepana de 25 de Mayo y el ex comisario Miguel Angel Oyarce fuerón acusados de explotación sexual por trata de personas.

El fiscal Leonel Gómez Barbella solicitó elevar a juicio el caso de la dupla que ya estaba imputado por incumplimiento de deberes de funcionario público y encubrimiento, por haber permitido que un local, llamado "Venus" y "Karibian", funcionaba como prostíbulo al menos entre enero de 2011 y octubre de 2012.

Según el Ministerio Público Fiscal de la Nación, el agente también acusó a la dominicana Nurys Caraballo Castillo y a su hijo José Luis Carpio Caraballo por el delito de trata de personas. Según la denuncia, madre e hijo habrían abusado de la vulnerabilidad de mujeres para explotarlas sexualmente y obtener provecho económico de la comercialización.

La causa se originó el 13 de septiembre del 201, cuando Juan Ignacio Gallo, empleado de la Dirección Nacional de Migraciones de Santa Rosa, denunció en la fiscalía federal haber recibido una llamada de una mujer dominicana que le informó que se había ido de un cabaret en 25 de Mayo, en donde quedaban varias mujeres a las que maltrataban, y una de ellas estaba embarazada.