El brutal femicidio de Lucía Inés Fernández, de 15 años, conmocionó a la provincia de Mendoza. Por el crimen está detenido un adolescente de 14 años, compañero de escuela de la víctima. Los familiares creen que ese sospechoso es el mismo sujeto que violó y amenazó de muerte a la chica durante el año pasado, por lo que denuncian la ineficacia de la Justicia.

Lucía fue encontrada muerta en la tarde del martes en una finca en Pueyrredón al 4000, en el distrito de Rodeo del Medio, a unos ocho kilómetros de Mendoza Capital. 

De las primeras pericias surgió que la adolescente fue asesinada de al menos siete puñaladas y golpes con un ladrillo en el rostro, al mismo tiempo que es investigado si además fue abusada sexualmente.

Tras el hallazgo del cadáver, intervino el fiscal de Homicidios Carlos Torres, quien ordenó la aprehensión del acusado, un adolescente de 14 años y compañero de escuela de la víctima.

Fuentes policiales indicaron que el acusado vive cerca del lugar donde se produjo el crimen y unos testigos declararon a la Policía que lo habían visto este martes al mediodía con Lucía por los alrededores de la escena del crimen.

Estos testimonios motivaron que efectivos acudieran a la vivienda del sospechoso, con quien se entrevistaron junto a su madre, circunstancia en la que habría confesado el femicidio

En medio del dolor, Rosalba Nievas, madre de Lucía, fue quien aportó el dato que podría ser el móvil del femicidio: hace un año, la víctima fue a un cumpleaños con una amiga y en ese lugar, un joven la violó. Después de atacarla, el abusador le juró que la iba a matar porque sabía que lo iba a “quemar con la Policía”, contó la mujer a Radio Nihuil.

Si bien hicieron la denuncia, el expediente jamás se movió, reclamó Nievas. "No hay justicia. Yo les dije, a mi hija la violaron, ¿qué van a esperar?, ¿a que la maten?, y me dijeron que no podían hacer nada, pero ahora mi hija está muerta, expresó entre lágrimas.

En ese sentido, Rosalba manifestó su sospecha de que el asesino de su hija sea la misma persona que meses atrás abusó sexualmente de ella. "Creo que puede ser el mismo. Si no, ¿quién más? A mi hija la quieren todos”, remarcó.

A pocos metros de donde estaba el cuerpo de Lucía, encontraron su mochila ensangrentada y también su teléfono celular, que será peritado para establecer quiénes eran los contactos habituales de Lucía y si había pactado encontrarse con alguien antes de que fuera asesinada.