Un hombre esta acusado que captar al menos 11 nenas y adolescentes en situación de vulnerabilidad y las explotó sexualmente con trabajadores rurales. La Cámara Federal de Apelaciones de Mar del Plata confirmó su procesamiento.

Los jueces Eduardo Jiménez y Alejandro Tazza en la misma línea del dictamen fiscal confirmaron el procesamiento del hombre acusado del delito de trata de personas con fines de explotación sexual agravado al entender que había prueba suficiente para sostener la acusación.

Los jueces entendieron que había prueba suficiente por hechos que se habrían extendido al menos desde 2006 y hasta agosto de 2012, cuando se realizaron los allanamientos en el marco de esta causa.

Fue a partir de una denuncia recibida en Procuraduría de Trata y Explotación de Personas. En medio del proceso, el acusado fue condenado en el fuero provincial  porque se constató que vendía estupefacientes en su vivienda, además de tener arma de fuego de manera ilegal.

Según la investigación, para captar a sus víctimas el imputado ganaba la confianza de las jóvenes, quienes permanecían en su casa por varias horas, días o incluso semanas.

“En su casa tiene todo un mundo para chicas jovencitas, como tacos altos, planchita, pinturas", señaló uno de los testimonios incorporados en la causa.

 Después el les ofrecía estupefacientes a las víctimas, con la finalidad de prostituirlas con él o con trabajadores rurales.

La mamá de una de las chicas, contó: “Les hace un trabajo fino a las chicas; primero les da droga, además de ropa y otras cosas, para luego prostituirlas”.

“El encausado atrajo a menores de edad a su domicilio ganándose su confianza, brindándoles acceso a internet, entrenamientos, ropa y cosas de su casa, de ese modo concurrían asiduamente al sitio estableciendo un vínculo con el imputado, quien las incitaba al consumo de sustancias estupefacientes, fomentando la adicción y así reforzar la sujeción de las niñas a su influencia y poder, a la vez que las trasladaba a localidades aledañas y a campos donde mantenían relaciones sexuales con peones”, señaló la Cámara Federal.

“Para lograr que las menores concurrieran a su domicilio, las invitaba directamente o por intermedio de otras víctimas que ya habían sido reclutadas con anterioridad, todo ello en un marco de profunda escasez económica, situación de minoridad, carencias emocionales de las víctimas y consumo problemático de estupefacientes”, detallaron los camaristas.

Fue  “contundente” el testimonio de una de las jóvenes ante las profesionales del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata. “El relato de esta víctima ante los profesionales referidos denota la situación de vulnerabilidad que atravesaba al momento de los hechos”, destacó la Cámara en la resolución.

Se detalló que cuando conoció al acusado la joven era menor de edad y madre de dos hijos con quienes convivía, y que también convivía con su pareja, sus tres hermanas, su madre y su padre, en un contexto de hacinamiento y violencias.

De acuerdo a la investigación dirigida por la Fiscalía Federal Nº1 de Mar del Plata, a cargo de Laura Mazzaferri, el caso cuenta con prueba testimonial brindada por madres de las jóvenes, personal educativo, municipal y del ámbito de la salud.

En el expediente además consta la prueba recabada en la casa del acusado, como por ejemplo algunas libretas donde había anotaciones manuscritas que dejaron en evidencia la presencia de las adolescentes en la vivienda.

Crónica Policiales: todas las noticias de hoy