Un hombre de 35 años, que habría sido identificado como el autor de un doble crimen ocurrido en febrero pasado, fue detenido luego de meses de investigación y tras una intensa persecución que incluyó la caída de un patrullero a un arroyo.

Se trata de un sujeto que se dedicaría a la venta de drogas, en el interior de una vivienda de la localidad de Guernica, donde habría permanecido oculto, a raíz de que era buscado por los asesinatos que se le atribuyen, de un hombre de 48 años y un joven de 17, ultimados a tiros en Burzaco.

Fuentes del caso informaron a crónica.com.ar, que las víctimas habrían sido atacadas en el marco de un presunto ajuste de cuentas, vinculado a la disputa entre bandas por el territorio para la venta de estupefacientes, tal como lo había determinado en un principio, el fiscal Nicolás Espejo, de la UFI 7 de Lomas de Zamora a cargo de la causa, que descartó desde un primer momento la hipótesis del robo.

El prófugo había sido identificado gracias a las tareas investigativas en busca de establecer el paradero del asesino, que habría actuado con la complicidad de al menos dos personas más, que permanecen fugitivas.

Los elementos incautados en poder del detenido.

Personal de la Comisaría Sexta de Almirante Brown con la colaboración del Grupo Halcón montaron este martes a la tarde un operativo de vigilancia encubierta en inmediaciones de la propiedad para aprehender al hombre, cuyo pedido de captura ya había sido ordenado.

Sin embargo, lo que parecía presentarse como un trámite, finalmente se tornó en una persecución cinematográfica cuando el acusado salió con un auto Chevrolet Corsa color gris oscuro.

El acusado escapó varios kilómetros.

Según informaron, la tarea primero consistió en un seguimiento que continuó hasta la localidad de Glew, donde el supuesto asesino advirtió la presencia policial y trató de escapar a toda velocidad en un desesperado intento de fuga que terminó en Ministro Rivadavia, en inmediaciones del Arroyo Las Piedras.

El malviviente realizó una maniobra brusca y dejó abandonado el vehículo para seguir su huida a pie, aunque en vano, ya que lo redujeron tras un breve rastrillaje, mientras un móvil de la policía caía a las aguas del arroyo antes mencionado.

Dinero y drogas secuestrados en el auto.

Entre sus pertenencias, encontraron un documento de identidad falso, a la vez que era registrado el auto, dónde secuestraron una bolsa con 350 gramos de cocaína, dos balanzas digitales, y la suma de 50 mil pesos de dinero en efectivo, entre otras cosas.

Por su parte, el personal policial a cargo de allanar la vivienda donde estaba escondido, incautaron en la casa una pistola semiautomática calibre 40, similar a la utilizada para matar a las víctimas del caso, tal como lo constataron los peritos de la Policía Científica, que habían advertido la presencia de balas de ese mismo calibre.

Las víctimas fueron acribilladas

El hecho ocurrió el 5 de febrero pasado, en el cruce de Prieto y Ruta 4, en la localidad de Burzaco, donde Mario Gustavo López, de 48 años, y Dylan Álvarez, de 17, fueron acribillados a balazos en medio de una aparente venganza.

De acuerdo al relato de algunos testigos, los vecinos escucharon algunos gritos y luego varios disparos. Mientras los agresores escapaban, el adolescente fue llevado a un centro asistencial, donde falleció como consecuencia de un disparo recibido en la nuca.

Mientras tanto, los peritos determinaron que López, quien falleció en el lugar, tenía un disparo en la cabeza y otro en el hombro izquierdo.

Según indicaron los voceros del caso, los asesinos, que serían de entre tres a cuatro personas, iban a bordo de una camioneta gris cuya, con la que escaparon a toda velocidad.