Burlando sobre el crimen de Fernando Báez Sosa: "Golpearon para matar, y mataron"
En el marco de la séptima audiencia que se lleva adelante por el homicidio del estudiante de Derecho de 18 años, el abogado de los padres de la víctima, sostuvo que los acusados "pegaron a mansalva y salvajemente en zonas vitales".
Fernando Burlando, el abogado de la familia de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado en la puerta del boliche "Le Brique de Villa Gesell en enero de 2020, aseguró este martes que, en base a los testigos que declararon en la causa, no hay dudas que los agresores "le pegaron a mansalva y salvajemente en zonas vitales" a la víctima, a quien abordaron de manera "sincronizada" con un "plan".
"Golpearon para matar y mataron. Pegaron a mansalva y salvajemente en zonas vitales", afirmó Burlando ante la prensa en relación al ataque contra Báez Sosa (18), por el que son sometidos a juicio ocho rugbiers.
En ese sentido, el letrado aseguró: "Se va a determinar la participación de cada uno de los acusados".
En la puerta de los tribunales de Dolores, donde se lleva a cabo el debate, el abogado consideró que los imputados "cuando tuvieron la oportunidad de hablar dijeron que no sabían porqué están presos" y que durante las jornadas del juicio "la actitud es la misma".
"Están interesados en lo que ven, que reproduce lo que hicieron, no creo que cambien su actitud", sostuvo.
Sobre los momentos anteriores al crimen, Burlando dijo que "había amenazas previas dentro de (el boliche) Le Brique y afuera, donde lo emboscan".
"Lo esperan no menos de cuatro minutos. Thomsen estaba en la puerta del kiosco frente a Le Brique, lo abordan (a Fernando) por la espalda, lo atacan cobardemente, le dan dos golpes (Enzo) Comelli y Ciro Pertossi en la nuca, donde lo invalidan de cualquier tipo de reacción. Cae casi inconsciente al piso y ahí se desata la salvajada de patadas y golpes hasta quitarle la vida. Si eso no es matar a una persona, díganme de qué se trata un asesinato", expresó.
Por último, sobre el contenido de los mensajes que se enviaron los imputados tras cometer el crimen, el abogado dijo que "en ningún momento hay ni un mensaje que diga, 'qué hicimos', 'qué nos pasó' o 'pidamos ayuda'; todo lo contrario, había festejo, ya sabiendo que había fallecido Fernando. Siguen con los festejos, con la cena, con la fiesta".
No obstante, Burlando puntualizó que "los chats analizados" prueban el "homicidio doblemente calificado por alevosía". "No hay dudas que fue alevoso, que le pegaron a Fernando en estado de indefensión, y ellos sin ningún tipo de riesgo", agregó el abogado. Además, expresó que el "concurso premeditado de dos o más personas también está claro".
"El plan, cómo lo abordan, es algo que está sincronizado", sostuvo. "Es lo que se ve, hay que contemplar la prueba y ver cómo accionó y cómo maniobró toda esta gente. Si uno ve todo lo que pasó, no hay que sacar siquiera conclusiones", dijo.
Asimismo, mencionó que no hay que olvidar que "intentaron ocultar pruebas, desviar la investigación". "Son todas situaciones que ocurrieron después del asesinato", manifestó.
Al ser consultado sobre Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, los dos rugbiers sobreseídos por la Justicia, Burlando expresó que "aunque respetan la decisión que se tomó", ambos "estaban en el momento, y en el lugar" del ataque.
"A mi me hubiera gustado traerlos como detenidos hasta el juicio oral, y que se aclare la situación acá", añadió.
Por último, Burlando expresó que los informes a los que fue sometida la zapatilla secuestrada en el allanamiento realizado en el chalet que alquilaban los rugbiers, "va a a probar lo que se derrama de seguro".
"Se hace una secuencia para determinar quién era el propietario de la zapatilla que pisó brutalmente a Fernando", cuyo resultado arrojó que el calzado le pertenecía a Máximo Thomsen, el rugbier más complicado de los ocho acusados.