Atraparon a dos ladrones por el crimen de un remisero: lo asesinaron a culatazos en la cabeza porque se resistió al robo del celular
Este crimen ocurrió en la zona sur del Gran Buenos Aires y la víctima era una persona de 33 años. El homicidio, perpetrado a principios de septiembre, había sido publicado en su momento, en forma exclusiva, por cronica.com.ar.
Mediante varios operativos que se efectuaron en el sur del conurbano bonaerense, los pesquisas policiales detuvieron a dos hombres vinculados al asesinato de un remisero, de 33 años, a quien agredieron a culatazos en la cabeza. El trabajador se resistió al robo del celular por parte de tres ladrones, que fingieron ser pasajeros del vehículo de alquiler.
Este mortal ataque, que cronica.com.ar publicó en su momento, de manera exclusiva, se registró en el sur del conurbano bonaerense y alcanzó gran trascendencia. Los investigadores buscan intensamente a dos prófugos.
Voceros judiciales revelaron a cronica.com.ar que los sospechosos fueron apresados por la muerte del trabajador, identificado, en forma oficial, como Jorge Orlando López.
De acuerdo a lo manifestado por los informantes, uno de los implicados, de 27 años, aparece sindicado como uno de los autores materiales del asesinato; y el otro, de 41, se encuentra acusado de tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil (sumario que tramita la fiscal Vanesa Lorena Maiola, de la UFI N° 6), porque se le incautó, en su poder, un revólver Doberman 32 largo.
Según los trascendidos, el primero de los sujetos fue capturado luego de ser localizado en su finca, situada en el cruce de La Rastra y calle 445, a la que había regresado para recoger distintas prendas de vestir con el objetivo de abandonar el barrio.
Mientras tanto, al otro individuo lo aprehendieron al ser requisada una vivienda ubicada en la calle 402 A, entre 441 y 445, en el mismo vecindario.
Estos procedimientos fueron desarrollados por los servidores públicos de la comisaría 2ª de la zona, con las directivas impartidas por Hernán Daniel Bustos Rivas, fiscal correspondiente a la Unidad Funcional Descentralizada N° 5 de la jurisdicción, quien entonces encomendó la realización de cinco allanamientos en domicilios.
Así fue el asesinato del remisero
Tal lo que se difundió, el ilícito se descubrió el 4 de septiembre cuando López fue encontrado herido de gravedad en el cruce de 400 y 449. Miembros del Comando Patrulla (C.P.) arribaron a ese lugar, al ser alertados de la situación por un llamado, que había sido recibido, minutos antes, en el número telefónico de emergencias 911.
Varios habitantes del barrio les expresaron a estos uniformados que la víctima había sido arrojada por marginales, que se desplazaban en un Peugeot 308 blanco.
Como consecuencia del episodio, el remisero tuvo que ser trasladado, de urgencia y en una ambulancia, al Hospital Zonal General de Agudos Mi Pueblo, donde perdió la vida, el 5 de septiembre.
Peritos de la Policía Científica, al ser convocados por las autoridades de la Justicia, revisaron luego el cadáver del hombre y lograron determinar que presentaba severos politraumatismos en la región del cráneo.
A su vez, la identidad de la víctima se había certificado fehacientemente en base a la utilización del Sistema Automatizado de Identificación Dactilar (A.F.I.S., por sus siglas en inglés).
Consta en la causa penal que los hechos comenzaron cuando tres malvivientes simularon ser clientes y solicitaron a un conductor de remises mediante una famosa aplicación de WhatsApp, indicándole que se dirigiera hasta la esquina de 408 A y 445. Por tal motivo, López (que además era un suboficial retirado de la Gendarmería Nacional Argentina) arribó al lugar en un Peugeot 308 blanco, con el dominio finalizado en 577.
Resistencia
Ya dentro del vehículo, los hampones le exigieron al remisero que les entregara el aparato de telefonía celular y, ante la resistencia de la víctima, los delincuentes golpearon a López a culatazos en la cabeza. Finalmente, los ladrones, que creyeron que el chofer había muerto a raíz de la agresión, resolvieron arrojarlo del automóvil, para de inmediato darse a la fuga.
Autoridades de la Estación de Policía del distrito se encargaron de supervisar los diferentes procedimientos. En forma preventiva, dicho expediente se mantiene caratulado “Homicidio críminis causae”.
Por F.V.