Un ladrón a bordo de una motocicleta robada se lanzó al riachuelo para evitar ser detenido en el barrio de Lanús, pero el intento se vio frustrado y ahora permanece internado bajo custodia policial por ingesta de agua contaminada, según manifestaron efectivos policiales que presenciaron el hecho.

El inusual suceso se llevó adelante cuando efectivos de la Patrulla de Respuesta Inmediata de Lanús le exigieron al maleante detener su marcha por no respetar el uso de casco ni patente del rodado. Por ese motivo, el sospechoso se dio a la fuga y comenzó la persecución desde el cruce de las calles Gral Olazabal y Pellegrini.

El seguimiento se llevó adelante por al menos 15 cuadras, hasta que el misterioso sujeto se vio acorralado en la intersección de las calles Osorio y Pellegrini, sobre la subida del Puente Olímpico en dirección a Capital Federal.

La batida de los agentes del partido bonaerense se realizó de manera eficiente, ya que el ladrón quedó atrapado por el cerco policial y no le quedó otra salida que bajarse de la moto y escapar a pie, para luego arrojarse a las aguas contaminadas del Riachuelo.

El sospechoso continuó su fuga nadando por el cauce para llegar a la zona de Capital Federal, pero su intento se vio frustrado y tuvo que ser socorrido por los bomberos de la zona, quienes lo sacaron del agua con una soga hasta la orilla al escuchar sus gritos desesperantes.

El delincuente tuvo que ser auxiliado por bomberos y asistidos por el SAME.

Resulta que el hombre con identidad reservada no fue derivado a una comisaría, sino que fue llevado por el SAME (Sistema de Atención Médica de Emergencias) de urgencia al Hospital Evita de Lanús, luego de ingerir una cierta cantidad de agua contaminada que puso en riesgo su vida.

Por el hecho intervino la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 de Lanús-Avellaneda, quien registró datos sobre el vehículo confiscado y se supo que el rodado Honda modelo CB color roja tenía pedido de captura por haber sido robado el 10 de enero de este año.