Apelaron la excarcelación del sujeto que drogó y violó a su empleada
El comerciante imputado está en libertad luego de que una jueza determinara que no existía peligro de fuga. La fiscal no sólo opina lo contrario sino que cree que el acusado puede entorpecer la investigación.
La fiscal que investiga el abuso sexual de una joven venezolana durante una entrevista laboral en el barrio porteño de Balvanera apeló la excarcelación otorgada al acusado por considerar que existe "peligro de fuga" y de "entorpecimiento de la investigación".
La apelación fue presentada por la fiscal Nacional en lo Criminal y Correccional 41, Silvana Russi, quien ya se había opuesto a excarcelar al imputado cuando la jueza Karina Zucconi le corrió vista antes de liberar al comerciante, quien está acusado del delito de "abuso sexual con acceso carnal".
De acuerdo con lo publicado en el sitio institucional www.fiscales.gob.ar, Russi consideró que las medidas de coerción impuestas por la jueza no resultaban a su criterio "suficientes para prevenir el peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación que se vislumbran en el caso".
El pasado lunes, la jueza Zucconi accedió al pedido de excarcelación solicitado por la defensa del imputado al considerar que "la pena en expectativa de efectivo cumplimiento por sí sola no es obstáculo para que el nombrado no obtenga su libertad".
"No hay de momento elemento alguno que lleve a presumir que el acusado intentará eludir el accionar de la justicia, ni que su detención se erija como necesaria para neutralizar el entorpecimiento del trámite del proceso", argumentó la magistrada.
En ese sentido, señaló que el acusado se identificó correctamente y no posee antecedentes penales, por lo que ordenó su excarcelación y le fijó una prohibición de comunicarse y acercarse a la joven denunciante o a su domicilio, en un radio de 100 metros.
También le prohibió la salida del país y le impuso la obligación de presentarse mensualmente ante el Juzgado, así sea de manera virtual.
Ante ello, la fiscal Russi presentó ahora un escrito para que intervenga la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional y revoque el fallo de la jueza.
La funcionaria judicial señaló que el delito de abuso sexual con acceso carnal tiene un máximo de pena que supera los ocho años de prisión y que el mínimo previsto impide que la condena pueda quedar en suspenso.
Además, esgrimió que el imputado premeditó el ataque sexual, ya que tenía en el comercio el sedante con el cual la joven, al ingerirlo, quedó en estado de indefensión, al tiempo que destacó la solidez de las pruebas reunidas hasta el momento.
En cuanto al peligro de fuga del acusado, la fiscal Russi se basó en la actitud del hombre cuando llegó la Policía al comercio y que mintió al aportar su domicilio, ya que dio una dirección que su propia hermana desmintió.
Es por ello que la funcionaria judicial sostiene que la soltura del imputado podría entorpecer la investigación, ya que aún resta realizar la evaluación psicológica de la joven y el análisis de distintos elementos secuestrados.
Sobre la restricción de la libertad del hombre, Russi concluyó que "no luce desproporcionada si se tiene en cuenta la gravedad del hecho que se le imputa, su modalidad de ejecución, su pena en expectativa y el estado de la investigación".
Fuente: Télam