Aberrantes detalles de un femicidio y pedido de justicia: el atacante está imputado por matar a otras dos mujeres
Las tres víctimas estaban embarazadas. Mañana comenzará a ser juzgado por la violación y asesinato de Carolina Medina en un hotel alojamiento. Cronica.com.ar habló con su mamá quien define al imoutado como a un "asesino serial".
Alejandra Leguizamón mañana va a estar frente al acusado de asesinar a su hija embarazada de ocho meses por primera vez. Será en el comienzo del juicio contra Ariel García. "Le quiero ver la cara, preguntarle por qué tanta maldad", dice a Cronica.com.ar de Carolina Medina.
Según determinaron los investigadores, Carolina fue violada, torturada y asesinada en un hotel alojamiento el 13 octubre del 2018 en Florencio Varela.
A raiz de este femicidio la familia de Carolina descubrió el asesinato de Natalia Belén Sotelo en el 2010 y de Silvina Miño quien fue descuartizada y encontrada en un riacho de la zona en el 2017. "El quedó imputado de estos crimenes, ellas también estaban embarazadas. Mañana comienza a ser juzgado por lo que le hizo a mi hija", dice Alejandra en referencia a García que estará sentado en el banquillo de los acusados frente al Tribunal Oral 1 de Florencio Varela.
Alejandra estos días estuvo descompuesta. " Se que estoy donde quería llegar, pero a vez me pone mal porque revivo todo. Es un asesino serial. Cuando mató a mi hija nos enteramos de las otras chicas", dice Alejandra que es quien se quedó criando a sus nietos que tenían ocho y seis años cuando asesinaron a su mamá.
"El papá de los chicos jamás se hizo cargo ni económicamente, ni afectivamente. Mi hija tenía otra pareja, habian buscado a ese bebé. Ella no tenía vinculo con este hombre, no se sabe como llegó al hotel. Ella tenía un golpe muy fuerte en la cabeza tal vez fue así que la llevó",considera la mamá que es parte de la organización de familiares Atravesados por el Femicidio.
Carolina tenía 25 años. "Estaba muy contenta con su pareja y la llegada del bebé. Ya tenía preparado el bolso por si el parto se adelantaba. Trabajaba haciendo changas de limpieza. Era alegre, divertida, siempre preocupada por sus hijos. Era muy compañera conmigo", dice Alejandra y ya no puede contener el llanto.
Cuando fue el crimen Alejadra había viajado a Santigo del Estero a ver a su papá que no estaba bien de salud y era su cumpleaños. Fue justamente ese día, el 15 de octubre, que se enteró de la peor noticia de su vida. "Ella estuvo dos días como NN. Mi marido me llamó, estabamos en el medio del campo. Mis tíos consigieron una camioneta y fuimos de pueblo en pueblo tratando de conseguir boleto. Un abuelo y su nieta nos cedieron sus pasajes porque no había, yo estaba con mi hermana. Nada volvió a ser igual desde aquel día", afirma Alejandra tiene 47 años y cinco hijos.
"Estoy desempleada y mi marido es albañil, no siempre hay trabajo. Pero no me quedé, ni me pienso quedar hasta que le den la condena que se merece. Desde el primer día con mi hermana fuimos a la fiscalía. El sobrino de mi marido se ofreció para representarnos y poder apelar si no estamos conformes con la pena", agrega la mujer.
Cuenta que quisieron dejar al bebé como prueba en un laboratorio. "Logramos poder enterrarlo junto a su mamá. Le pusimos Nazareno que es el nombre que ella había elegido", dice.
"Lo único que quiero es que la Justicia haga Justicia. Que sea una condena ejemplar. Lo que hizo con mi hija y las otras chicas es aberrante. No puede ser que estuviera libre. Que pague lo que tenga que pagar. El nunca declaró", sostiene Alejandra que mañana junto a su marido y su hermana estarán en el juicio.
En cuanto a las otras chicas la autopsia determinó que Natalia (22) recibió 33 puntazos con un destornillador en el cuello. Cinco de esas lesiones fueron en la yugular, la laringe y la traquea. Murió desangrada en la vereda de la casa de su agresor en Quilmes, quien alegó un robo. La Justicia le creyó. Fue en noviembre de 2010. La causa se tramitó por entonces como un homicidio en legítima defensa. Ocho años y medio después fue imputado por este crimen. "Lo que yo se es que ellos tenían una relación mientras él estaba casado y ella le fue a decir que estaba embarazada", cuenta Alejandra.
El cuerpo de Silvana (28) apareció descuartizado en 2017. Él fue el último que la vio con vida. "También estaba embarazada, hace unos días quedó imputado", relata la mamá de Carolina.
García llega detenido al juicio acusado de “abuso sexual con acceso carnal seguido de muerte, agravado por ensañamiento y alevosía en un contexto de violencia de género, y del delito de aborto” de Carolina.