Un operario se llevó una aterrorizadora sorpresa mientras estaba en plena construcción de una vivienda, cuando tras escuchar diversos ruidos en el techo de la misma, decidió tomar su celular y captó una imagen terrorífica en ese lugar, situación que lo hizo pensar que se trataba de dos extraterrestres parados que lo observaban aunque algunas creen que eran de dos lechuzas.

El asunto es que el video apareció hace un largo tiempo y al día de hoy todavía sigue causando conmoción en las redes sociales, y fuentes informaron que unos trabajadores de la construcción habían encontrado a unas supuestas aves rapaces, conocidas como lechuzas del este, en un lugar en Visakhapatnam, capital del estado indio de Andhra Pradesh.

Al haberse renovado en los últimos días el interés por estas misteriosas aves, Popular Mechanics contactó al ornitólogo Kevin McGowan, del Laboratorio de Ornitología de la Universidad de Cornell para descubrir el por qué de su siniestra apariencia.

"Las lechuzas pequeñas son unas criaturas cuyo aspecto es de lo más extraño de nuestro planeta", dice McGowan. "Sin plumas son verdaderamente raras, y permanecen así hasta que están completamente emplumadas".

¿Pollos de lechuza?

McGowan sospecha que los pollos de lechuza del vídeo probablemente tenían entre dos y tres semanas de edad, por lo que no tienen las plumas que estamos acostumbrados a ver en las lechuzas adultas.

"Estas pequeñas lechuzas tienen abundantes y densas plumas, lo que les aporta ese color blanco", dice McGowan. Es un momento de sus vidas donde están en pleno desarrollo de los músculos y de otras partes de sus cuerpos, antes de dedicar energía a la formación del cuerpo o al contorno de las plumas por las cuales reconocemos a las lechuzas.

"Básicamente, las aves crecen de dos maneras", dice McGowan. Algunas aves, como los patos y los pollitos de gallina, salen del huevo ya con plumas. En cambio, la mayoría de las aves, dice, no tienen plumas cuando nacen. Pueden tener un poco de suave plumaje, pero en gran medida parecen embriones y con el tiempo les van saliendo plumas por el cuerpo. Y una vez que les crecen plumas, las mudan.

"Sus caras también son muy extrañas", dice McGowan. La mayoría de la gente piensa que que los búhos y las lechuzas tienen un rostro redondo y esférico, pero lo cierto es que tienen un cráneo plano, que está comprimido a un lado. Si mira detenidamente la cara de una lechuza común, notará que está dividida por la mitad.

Las lechuzas cuentan con un sistema auditivo excelente, y según McGowan toda su cara es como una especie de orejas gigantes, completamente preparadas para canalizar el sonido en la apertura de sus oídos.

Los ojos de los búhos y las lechuzas son además un increíble prodigio de la historia evolutiva. La mayoría de los animales de presa tienen los ojos a los lados de la cabeza para poder mover fácilmente el cuello y detectar al animal que quiere cazarlos. Los depredadores, por otro lado, como pueden ser los jaguares, los búhos y, sí, los humanos, tienen los ojos en la parte frontal de la cara.

Estas son las extrañas criaturas que estaban en el techo (Twitter).

"Eso es precisamente lo que vemos en esos polluelos", dice McGowan. "Sus ojos simplemente no están donde crees que deberían estar". Los búhos y las lechuzas giran el cuello porque no pueden mover los ojos dentro de sus cuencas.

La postura es la clave. Las lechuzas están ahí quieras con las alas a los lados, lo que les hace parecer similares a criaturas humanoides. "No estamos acostumbrados a ver pájaros de esa manera", dice McGowan. "Parecen exactamente como los monstruos que hemos visto siempre en la ciencia ficción". Si recuerdas a los extraterrestres de Encuentros en la tercera fase, Star Wars o Star Trek, se les parecen bastante. De hecho, muchos de ellos tienen rasgos humanos.

Aves sorprendidas

McGowan dice que las aves del vídeo se muestran sorprendidas, por lo que es probable que comprensiblemente se alejen de la persona que las observa. "Los búhos y las lechuzas tienen patas muy largas", dice. "En las imágenes se les ve mcho más erguidas de lo que se podría esperar. La mayoría de las veces, lo normal es que veamos a este tipo de aves posadas en una rama, sentadas sobre su pecho o encorvadas sobre sus patas de plumaje más oscuro".

McGowan dice que hay evidencias que sugieren que nuestras primeras historias de fantasmas podrían haber sido inspiradas por aves nocturnas y silenciosas. Las lechuzas, que tienen vientres de color blanco brillante, son excelentes a la hora de volar prácticamente en silencio, batiendo sus alas sin hacer apenas ruido. Imagínate ver sus ojos brillantes y su gran extensión de plumaje blanco volando desde un oscuro establo o la cripta de un cementerio. "Es normal que la gente pensaba que esos lugares estaban embrujados", dice McGowan.

Las lechuzas son criaturas increíbles: son de las pocas aves terrestres que se pueden encontrar en seis de los siete continentes. Algunas razas de lechuzas, como las que se encuentran en la parte noreste de los Estados Unidos, están en peligro de extinción, según la página web de Cornell Lab. Les encanta esconderse y anidar en las vigas de los graneros y otros edificios abandonados, cazan ratones y otros pequeños roedores, y son conocidas por su chillido agudo, que es verdaderamente aterrador.

Pero no son extraterrestres ni fantasmas. Tal vez son simplemente como nosotros, buscando el amor, roedores y un hermoso y rústico granero para establecerse en algún remoto lugar.