Por Marcelo Peralta Martínez
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Esta historia, una de las más viejas que recorre varios sitios, cuenta que un hombre fue decapitado, durante una disputa por el amor de una mujer, y cada noche regresa al lugar del crimen en busca de venganza.

Desde aquel entonces y hasta ahora, sobre aquellos hechos con numerosas versiones ocurridas en la provincia de Buenos Aires, aunque si bien todas tienen puntos en común, con coincidencias y otras interpretaciones, podrían no hablar sobre el mismo acontecimiento sobre esta historia con csabor a leyenda, de comienzos del Siglo XX, entre guerras, soldados y el corazón de una dama. Pormenores de un suceso que siempre sabe como sorprender a nuevas generaciones.

A todo o nada

Este relato llega desde la bonaerense ciudad de Punta Alta, en el 1900, durante la construcción de la Base Naval Puerto Belgrano. Se trata del alma en pena del coronel Carlos Mallo, quien cumplía funciones al frente del Batallón de Artillería de Costas, y que fue decapitado por Pablo Funes, sargento Segundo Distinguido, encargado del Batería IV, con el que se disputó en duelo el amor de una mujer.

Hecho que ocurrió en la playa, lugar elegido como el campo del honor, reveló Fernanda Martel, profesora y miembro de equipo que trabaja en el Archivo Histórico Municipal de Coronel Rosales, de la mencionada ciudad. Más tarde, la experta indicó que “la victima alcanzó a internarse en el mar y aunque después el cuerpo se rescató, nunca se encontró su cabeza”.

Más detalles

Según agregó Martel, versiones dicen que el sargento esperó a que el coronel esté subido a un árbol y cuando su futura víctima pasó, lo decapitó con su sable y enterró la cabeza, a pocos metros del lugar. La investigadora afirma que en los libros de novedades de esa guarnición militar figura notificado el duelo y la muerte. Tras el episodio, hubo informaciones contradictorias. Algunas hablan que Mallo ninguneaba a Funes, haciendo pesar su cargo sobre él, mientras otros dicen que en una oportunidad lo abofeteó.

En paralelo se cree que Funes enloqueció por amor y perdió la cabeza, cometiendo sin culpa alguna una sangrienta y fría decapitación. Lo cierto es que, desde entonces, el fantasma del teniente intenta recuperar su cabeza. Cabe destacar que el sargento fue llevado a juicio y allí recibió una condena por tiempo indeterminado. De hecho, cumplió su pena en la Isla de los Estados, y quedó libre 11 años después, cuando Figueroa Alcorta, presidente de la Nación conmutó su pena.

La fábula

Una vieja fábula inidca que el “fantasma sin cabeza” se aparece para obtener una nueva y reemplazar la que perdió, hace ya 121 años. En otro orden, desde entonces se cree que “ataca” a los soldados que están de guardia en su garita para que salgan de allí y decapitarlos. En tanto, algunas versiones dan cuenta que el fantasma sin cabeza camina por las noches, también en esos días oscuros de tormentas, mientras que otras versiones hablan de un espectro montado a caballo, que fue visto cerca del mar.

De película

Este último fragmento citado, trae un paralelismo el afamado cuento de terror “La leyenda del Jinete sin cabeza”. Así las cosas, el gigante de Disney realizó un filme sobre el fenómeno en la que se reflejó, como en forma fría y sangrienta el Jinete terminaba con sus víctimas.

Según esa historia, quien montaba al caballo en busca de venganza era un antiguo soldado, experto en matar y temido por los guerreros rivales que fue hallado en pleno bosque nevada por dos nenas e algunas integrantes del ejercito enemigo.

Allí su suerte cambió cuando producto del ruido de una rama que quebró una de las nenas, es descubierto. Su castigo, ser decapitado y enterrado allí mismo. Pero no es todo, una de las pequeñas, tuvo la macabra idea de hechizar la cabeza del jinete y darle la misión de vengarse. Y así sucederá.

Con el correr de los días, el pueblo se iba deshabitando, entre las matanzas y quienes se mudaba por temor, hasta que un joven experto en investigaciones es enviado a resolver el enigma. Tiempo después y lejos de renunciar, este sujeto no solo descubre toda la verdad sino que además se enfrenta cuerpo a cuerpo con el jinete.

Afortunadamente, los testigos de la historia revelada en el sur bonaerense jamás debieron enfrentarlo de tal manera, al borde de arriesgar su vida, pero si internamente deben saber llevar y manejar ese profundo miedo que les quedó desde entonces, ya que todos y cada uno de los agentes que cubrieron los distintos sectores de la base Puerto Belgrano hablaron sobre las míticas apariciones del decapitado. (Fuente: masrionegro.com)

OTRAS APARICIONES
VARIOS HECHOS REGISTRADOS



Las historias, aquí develadas fueron contadas por aquellos soldados que “coincidieron” con el fantasma. Por ejemplo, el boca en boca, habla sobre una extraña situación que ocurrió durante un cambio de guardia cuando frente a una móvil se apareció.

Por su parte, otros ex soldados que cumplieron funciones en esas dependencias le revelaron a Eduardo Reyes, periodista y escritor de Viedma, que lo vieron aparecer varias veces en las cercanías de la garita en la que se encontraban durante las guardias de madrugada.

Además, subrayaron que una vez, el fantasma “atacó” a uno de los autos oficiales de la fuerza, situación que derivó en que quien conducía se arrojara del vehículo en movimiento, tratando luego de reincorporarse y emprender su carrera a la salvación