Cuáles son los animales que se relacionan con la brujería y por qué
Gatos negros, búhos, lechuzas, murciélagos, entre otros seres vivos, son las especies del reino animal que resultan mal vistas por la humanidad.
Cuando hablamos de halloween o de brujas, como así también de piratas, solemos hacer asociaciones con animales. Ahora, la pregunta es: ¿Por qué se relaciona a diversas especies de animales según en lo que uno piense y qué tienen que ver estos con las brujerías, maleficios, historias y demás?
Gato negro, arañas, serpientes, lechuzas, loros, murciélagos, entre otros, son los animales que se llegan a relacionar con fenómenos extraños o mejor dicho, paranormales.
Varias son las hipótesis al respecto, y una de ellas es la de Adrienne Mayor, quien es experta en clásicos de la Universidad de Stanford, que cree que estos animales nocturnos están vinculados por su horario y actividad.
"Se dedican a actividades misteriosas en la oscuridad y por eso han quedado encasillados en la superstición desde la antigüedad. La combinación de tonos grises, marrones o negros con hábitos nocturnos enigmáticos evocaban una sensación de asombro y miedo en la época en que las únicas luces durante la noche procedían de lámparas de aceite y velas de cera", indicó.
Qué tienen los murciélagos
La estudiosa en estos temas, señaló que los murciélagos, al ser el único mamífero que puede volar, se consideran seres enigmáticos, posiblemente por motivos infames, en tiempos antiguos. "Se parecen a las despreciadas ratas, pero tienen peculiares alas con garras que rodean sus cuerpos como una capa oscura mientras cuelgan boca abajo de los árboles", dijo Mayor.
Aunque algunos murciélagos son diurnos, la mayoría tiene hábitos nocturnos. En el mundo viven casi 1.400 especies de murciélago. Y ya coman fruta, néctar, insectos o ranas, casi todas cazan por la noche.
Además, cabe destacar que el murciélago es uno de los símbolos más representativos de Halloween debido a su reputación de "bebedor de sangre", al igual que el legendario vampiro.
Sin embargo, su mala fama solo viene de algunas especies de murciélagos que se alimentan de sangre de caballos, de vacas o todo otro tipo de ganado, incluso de la sangre de los hombres. Estos se denominan los murciélagos vampiro, y se encuentran principalmente en los países tropicales de América Central y del Sur.
Los gatos negros
En la misma línea, para encontrarle una explicación histórica, o científica, Mayor comentó que "en la Europa medieval, se creía que los gatos, especialmente aquellos tan negros como la noche, eran los compañeros de las brujas. Algunas personas hasta creían que las brujas renacían en forma de gatos negros".
Los gatos negros, al correr de los años, mantuvieron la mala reputación. A menudo se creía, y en algunas culturas continúa, que, si un gato negro se cruza en tu camino, algo malo te sucedería.
En un estudio realizado por la Universidad de Colorado, Estados Unidos, se reveló que los gatos negros son los menos adoptados debido a la mala fama que los relaciona con la brujería. De todas formas, esta inclinación comenzó a cambiar en los últimos 20 años con las nuevas generaciones, que son más escépticas a dichas creencias. En el siglo XVII, el gato comenzó a ser asociado a la brujería en muchas áreas del mundo. El gato negro fue visto generalmente como buena suerte; sin embargo, en los EE. UU. y zonas de Europa, que mantuvieron cazas de brujas, la asociación con las brujas los hizo ser considerados como portadores de mala suerte.
Búhos y lechuzas
En estos casos, según la creencia popular, la lechuza es un ave desgraciada, compañera de las brujas como el mochuelo y se las clavaba sobre las puertas de las granjas para paralizar al diablo, del cual se decía que tomaba a menudo su forma. En Cantabria, las metamorfosis reversibles y recíprocas de la lechuza y de la bruja tuvieron amplia notoriedad, hasta el extremo de que ambas fueron las pesadillas de los aldeanos más crédulos. Así, cuando se capturaba una lechuza se la degollaba enterrándola a varios metros de profundidad echando piedras gruesas encima. Esta práctica se realizaba, porque creían que se trataba de una bruja que comenzaría a hacer daños.
La particularidad de estos animales, que no se encuentra en otro, es que sin forzar sus tendones ni dañar sus músculos, los búhos pueden girar su cabeza 270 grados, al más puro estilo de la niña del exorcista. Podría parecer una cuestión de magia, pero los científicos de la escuela de medicina de la Johns Hopkins University encontraron la explicación. "Para apartar el mal, los romanos clavaban un búho muerto en la puerta, una creencia que persistió hasta el siglo XIX en Inglaterra", señaló Mayor, respecto a la historia.
Las arañas también son de la brujería
Los arácnidos no quedan fuera de la relación con los fenómenos paranormales, por lo que la experta señaló que "las arañas suelen ser negras o grises y se esconden durante el día. Suelen tejer sus telarañas en rincones oscuros y en lugares abandonados, posibles escondrijos de fantasmas. Las arañas también son temidas por sus picaduras venenosas".
Pasada la peor etapa de la pandemia por coronavirus, un estudio de 2021 descubrió que las arañas se alimentan de serpientes en todo el mundo, lo que ha vuelto a los arácnidos aún más espeluznantes, y temidos de lo que ya eran.
La historia de los sapos
En el siglo XVII se decía en Bearn que cada bruja tenía un sapo en un escondite, que acudía cuando ella le llamaba por su nombre y que era una garantía que el demonio le había dado; una historia de la misma región habla de un gran sapo que una bruja escondía en la cabecera de su cama, bajo un paquete de ropas.
La creencia de que los humanos pueden transformarse en animales es muy antigua. Se creía que esta habilidad estaba reservada a las brujas especialmente leales y que era una especie de recompensa del diablo. En los que respecta a la ciencia y la historia, los sapos no solo eran considerados criaturas poco atractivas debido a su piel verrugosa, sino que además, como en el caso de las arañas, se sabía que sus cuerpos contenían toxinas.
"Los antiguos griegos y romanos creían que las ranas tenían dos hígados, uno lleno de veneno mortal y otro que contenía un antídoto", comentó Mayor. Por eso los sapos se usaron en conjuros y en brujería desde la antigüedad hasta la Edad Media —e incluso más tiempo— en Europa.
"Los sapos eran ingredientes comunes en recetas para toda una serie de conspiraciones para envenenar a alguien que implicaban magia negra y ritos satánicos descubiertos en la Francia del siglo XVII. La vinculación al veneno y a la brujería dio a los sapos una reputación infame que todavía conservan en la actualidad", afirma Mayor. En la actualidad, un plato de rana es caro.
Los cuervos y la muerte
El cuervo es un ave simbólica que estuvo, y está vinculada en multitud de ocasiones con el mal, el demonio y la oscuridad. Si se hace un rápido recorrido por algunos de los textos básicos del Catolicismo, encontramos que las referencias al cuervo son muy irregulares en sus connotaciones.
El animal número XIII es el cuervo, y de él se dice que es un ave toda negra y que cuando sus crías nacen son blancas, por lo que no los alimenta hasta que se vuelven negras. Además, explica que cuando encuentra un hombre muerto lo primero que hace es comerse sus ojos y luego los sesos, por eso es que también se lo relaciona con la muerte, ya que es uno de los pocos animales que merodea alrededor del cuerpo de un hombre muerto. Al ser un pájaro carroñero, por lo que se le asocia con la muerte; se cree que no tiene miedo a morir, por lo que es capaz de anunciarla.
Por otra parte, en la Edad Media se relacionaba con la traición por su color, porque es opuesto a la paloma blanca de la paz. En la épica medieval, cuando un cuervo aparece volando delante de un personaje, especialmente si procede del lado siniestro de dicho personaje, es una señal que solo puede tener dos significaciones: la traición o un mal agüero.
Con la brujería
Por otra parte, en el chamanismo representa a las personas que usan la magia y se le asocia a menudo con la brujería. En este sentido, se cree que cuando sueñas con un cuervo intenta mostrarte una verdad que ignorabas o transmitirte un mensaje de tus guías espirituales. Es símbolo del destino y de transformaciones personales; es el pájaro de la metamorfosis y la transformación.