Son numerosas las personas que desean ganar la lotería, pero alcanzar ese sueño conlleva riesgos, especialmente en lo que respecta a la gestión adecuada de la fortuna obtenida. En este contexto, surge la historia de un joven que logró ganar 12 millones de dólares, solo para dilapidarlos en un abrir y cerrar de ojos, viéndose obligado a recurrir a un plan social para sobrevivir.

El protagonista de esta historia se llama Michael Carroll, y en su momento causó una gran polémica: en 2002, con apenas 19 años, la suerte le sonrió y se convirtió en multimillonario. En total, ganó la suma de 9.700.000 de libras esterlinas, equivalente a alrededor de 12 millones de dólares estadounidenses -más de cuatro mil millones de pesos argentinos hoy-.

Carroll vivía en el condado de Norfolk, en el Reino Unido, y anteriormente desempeñaba el trabajo de recolector de residuos, pero su vida experimentó un cambio drástico cuando ganó la lotería con tan solo una libra invertida en un boleto. Sin embargo, la fortuna adquirida se esfumó rápidamente debido a sus decisiones imprudentes, ya que gastó el dinero en alcohol, drogas, prostíbulos, autos de carreras y vacaciones lujosas

Para sorpresa de muchos, en 2013, una década después de su gran victoria, Michael se encontraba en bancarrota y dependía de un subsidio mientras buscaba desesperadamente un nuevo empleo. El hombre, ya no joven, había retornado a la vida que conocía antes de su efímero episodio como millonario.

En 2002, Michael Carroll ganó 12 millones de dólares, pero los gastó en fiestas sexuales y drogas, hasta que terminó en bancarrota.
En 2002, Michael Carroll ganó 12 millones de dólares, pero los gastó en fiestas sexuales y drogas, hasta que terminó en bancarrota.

En su momento, Carroll se jactó de haber tenido relaciones con 4000 mujeres y de comenzar su día con "tres líneas de cocaína y media botella de vodka".

Cómo fue la vida del hombre que ganó la lotería y pasó de millonario a dependiente de un plan social

Michael Carroll derrochó su fortuna en un estilo de vida decadente, enfocándose en el consumo de drogas, alcohol y encuentros con prostitutas, según el Daily Star. Su notoriedad creció a medida que organizaba fiestas escandalosas con amigos llenas de mujeres desnudas que llevaban bandejas de cocaína. 

En una oportunidad contó que llegó a gastar hasta 2300 dólares diarios en cocaína, durante una etapa en la que "inhalar lo que fuera" era su norma. Las drogas y las fiestas sexuales se convirtieron en una constante en la vida de Carroll, llegando a costarle esa peligrosa combinación un total de hasta 58.000 dólares.

"Las mujeres simplemente se me acercaban y me ofrecían sexo", había asegurado Carroll. Sin embargo, a pesar de lo sucedido Michael aseguró que no se arrepiente de lo vivido y que no haría nada diferente: "Fueron los mejores 10 años de mi vida", sostuvo.

Además de dilapidar su fortuna en fiestas, Carroll también gastó su dinero en lujosos caprichos como dos Mercedes Benz, dos BMW, cuatro casas en el Reino Unido, una propiedad vacacional en España y un considerable número de acciones del Glasgow Rangers, su club de fútbol favorito.

Durante 10 años, Michael Carroll gastó los millones de dólares en lujos materiales y fiestas 'locas'.
Durante 10 años, Michael Carroll gastó los millones de dólares en lujos materiales y fiestas "locas".

Las consecuencias de una vida descontrolada: de ganador de la lotería a la bancarrota

El derroche de Michael Carroll no se limitó a bienes materiales, ya que también se vio involucrado en actividades ilegales al cometer delitos menores; fue detenido por posesión de cocaína y amenazar a un par de jóvenes con un bate de béisbol, lo que resultó en una condena de 9 meses de cárcel.

En 2013, el hombre se declaró en quiebra y pasó tres meses en un hospedaje para personas sin hogar después de no encontrar trabajo. De acuerdo con la última información que se conoció de él, se sabe que Michael trabaja como repartidor de carbón y madera, tras haber pedido un apoyo económico del gobierno.

"Vivo un estilo de vida bueno y libre ahora, y soy más feliz porque recuperé mi vida, soy un ganador de la lotería sin piel", había señalado en una entrevista.

Michael Carroll fue apodado 'The King of Chavs' por volverse millonario de la noche a la mañana y dilapidar su dinero rápidamente.
Michael Carroll fue apodado "The King of Chavs" por volverse millonario de la noche a la mañana y dilapidar su dinero rápidamente.