No hace falta ser muy inteligente para pensar que ganar la lotería es uno de los sueños más frecuentes de la gente, sin embargo, pocos son los que corren con esta suerte. Tal como Callie Rogers, que en 2003 se convirtió en la mujer más joven en ganar la lotería, recibiendo 2.2 millones de euros.

Lo cierto, es que Callie ganó la lotería cuando tenía 16 años, ahora con 36 no le queda nada de los millones que recibió en 2003, ya que la mujer los gastó en ropa de lujo, fiestas, regalos para sus amigos y sobre todo, en cirugías plásticas.

Según Callie, para la revista Closer, era demasiado joven cuando recibió el dinero por lo que decidió operarse los pechos tras anunciarse ganadora de la lotería. Pero no solo para eso, sino también para recuperarse anímicamente luego de terminar su relación amorosa con el padre de sus hijos.

Sin embargo, esto no paró ahí, ya que de acuerdo con amigos de la joven, ella comenzó a tomar malas decisiones. Incluso se involucró en una pelea donde casi pierde la vida, y comenzó a operarse para llenar estos huecos emocionales que le dejaban los pleitos en los que se vio inmiscuida.

Pero hoy en día su vida es distinta ya que han aparecido fotos donde se la ve comprando en una de las tiendas más baratas de su ciudad. Además, su imagen también cambió mucho respecto a la que tenía cuando ganó la lotería en 2003.

Antes, conducía un Hyundai 4x4 y ahora, regresó a un modesto Peugeot y también tuvo que pedir prestado al banco para pagar una multa de transito.

En conclusión, Callie tuvo en sus manos millones de euros que no supo administrar y que desfalcó en cirugías plásticas que hoy la tienen irreconocible pero llena de deudas. Además, su estado anímico sigue sin mejorar a pesar de todos los intentos que hizo.