Un sorpresivo caso generó conmoción en los últimos días. Una joven de 21 años, que estaba embarazada de 5 meses, murió repentinamente mientras dormía una siesta. El hecho sucedió a pocos días de que la víctima se enterara que estaba esperando una nena.

El trágico suceso ocurrió en la localidad de Cwmbran, en Gales, donde una joven, identificada como Leah Roberts, de 21 años, fue hallada sin vida en su habitación, según contó su amiga Becky Davies, quien compartió su historia en el sitio WalesOnline. 

Según relató la propia familia de la joven, Leah había empezado a sentirse mal unas horas antes en una excursión y por eso decidió acostarse unos 30 minutos para poder recuperarse de la mejor manera. 

Unos minutos más tarde, su abuelo fue a su habitación con la intención de despertarla, pero la encontró sin signos vitales. El anciano fue inmediatamente a avisarle a su abuela y comenzaron a hacerle RCP, pero no lograron reanimarla. 

Ante esta situación, llamaron a la ambulancia y a los pocos minutos llegó a la propiedad. Posteriormente la trasladaron al hospital más cercano, pero desafortunadamente, los médicos no pudieron salvarle la vida ni a ella ni a la bebé. “Eso fue todo, simplemente se fue a dormir una siesta y nunca se despertó”, destacó Becky Davies, amiga de la familia.

La familia de Leah espera los resultados de la autopsia para determinar que fue lo que ocurrió con su hija y su nieta. “El mundo es tan cruel, merecías mucho más de lo que tenía para ofrecerte a vos y a tu hermosa niña... descansá en paz en el paraíso, mi niña”, fueron las desgarradoras palabras de despedida de la madre de Leah en redes sociales.